Pobreza

Voluntariado energético contra la pobreza

La iniciativa de la Fundación Gas Natural Fenosa se desarrolla en colaboración con entidades sociales como Cruz Roja. Comenzó en Cataluña, Madrid y Galicia, pero este año ha extendido su actividad a otras comunidades autónomas

Muchas personas que no pueden afrontar sus facturas reciben el asesoramiento de Gas Natural Fenosa a través de empleados voluntarios de la propia entidad
Muchas personas que no pueden afrontar sus facturas reciben el asesoramiento de Gas Natural Fenosa a través de empleados voluntarios de la propia entidadlarazon

La iniciativa de la Fundación Gas Natural Fenosa se desarrolla en colaboración con entidades sociales como Cruz Roja. Comenzó en Cataluña, Madrid y Galicia, pero este año ha extendido su actividad a otras comunidades autónomas.

«Somos el corazón de la empresa. Puede que el público nos vea como una mole, una gran compañía. Pero, al final, toda entidad está compuesta por personas». Esto es lo que supone para Carmen Selva ser voluntaria energética de Gas Natural Fenosa. Resulta inevitable que la labor de estos empleados cobre relevancia cuando ponemos los datos sobre la mesa. Al menos siete millones de españoles, el quince por ciento de los hogares, dedicó más de un diez por ciento de sus ingresos totales a cubrir facturas energéticas en 2015, según un estudio de Economics for Energy. En este sentido, y para mitigar los efectos que la pobreza energética pueda tener sobre los sectores más desfavorecidos de la sociedad, Gas Natural Fenosa puso en marcha un paquete de mejoras para la atención y gestión de sus clientes más vulnerables, así como para ayudar a los servicios sociales y entidades del Tercer Sector. El Plan de Vulnerabilidad de Gas Natural Fenosa es el primero desarrollado por una energética española.

El programa, que ya se ha puesto en marcha en toda España, contempla más de 20 medidas tanto operativas como sociales que tienen como objetivo reforzar la gestión de los clientes vulnerables. En total supondrá una inversión de 4,5 millones de euros anuales. En el marco de este plan, la Fundación Gas Natural Fenosa ha incorporado una nueva vía de actuación cuyo objetivo es el acercamiento con las entidades del Tercer Sector. La organización colabora con los servicios sociales y con diversas entidades españolas sin ánimo de lucro que trabajan día a día con esta problemática. La Fundación ha firmado convenios de colaboración exclusivos con varias organizaciones sociales –Cruz Roja Española, Cáritas, Fundació de l’Esperança, Hazloposible o Fundación Secretariado Gitano– para trabajar conjuntamente en la lucha contra la vulnerabilidad energética. La Fundación Gas Natural Fenosa también ha puesto en marcha un programa de voluntariado corporativo orientado a colectivos desfavorecidos y al que pertenecen trabajadores como Carmen Selva. Se trata de empleados de la compañía energética que destinan parte de su tiempo a la atención de personas vulnerables para buscar la mejor solución para cada situación particular. Este plan se desarrolla en colaboración con diferentes entidades, como Cruz Roja Española, Fundación Secretariado Gitano y Fundació de l'Esperança. «La idea de crear un voluntariado energético se enmarca en el nuevo Plan de Vulnerabilidad que lanzó la compañía eléctrica en enero. La empresa ya disponía de voluntariados en temas sociales y medioambientales, pero con el voluntariado energético «se ha abierto un nuevo ámbito de actuación», explica Martí Solà, director de la Fundación.

«El objetivo es colaborar con las entidades del Tercer Sector que atienden directamente a personas que se encuentren en situación de vulnerabilidad; desde la Fundación podemos dar soporte y solución a todos los temas relacionados con la energía. Nuestra finalidad es atender y gestionar las peticiones de clientes vulnerables para que puedan solucionar sus dudas y preocupaciones lo más rápido posible», añade. Desde su punto de vista, «el voluntariado energético busca trabajar en toda España con entidades del Tercer Sector y que dispongan de proyectos o iniciativas relacionadas con la pobreza energética. Estas corporaciones conocen el día a día y la realidad de las familias, y es aquí donde podemos prestar nuestra ayuda», apunta Solà. En concreto, los voluntarios de Gas Natural Fenosa se alían con sus iguales de Cruz Roja para formar una Brigada Energética. Esta tiene a su cargo una familia vulnerable a la que asesora para que sus miembros sean más eficientes en el uso de la energía. Dentro del programa de voluntariado con Cruz Roja se desarrolló «Asesoría Energética en Hogares», el primer proyecto de Voluntariado Energético con el que se quería informar y asesorar a familias vulnerables. Proyecto piloto El voluntariado energético comenzó el año pasado con un proyecto piloto en el que participaron diez voluntarios, y que concluyó con un resultado muy satisfactorio.

Comenzó en Cataluña, Madrid y Galicia y ya está en marcha su extensión a provincias de Castilla La Mancha, Castilla y León, Andalucía, Comunidad Valenciana, Navarra, La Rioja y Canarias. «Cualquier empleado de Gas Natural Fenosa puede ser voluntario. Estos no necesitan tener conocimientos previos sobre facturación o eficiencia energética, sino que asisten previamente a la Escuela de Energía de la Fundación Gas Natural Fenosa, que es donde se les proporcionan conocimientos específicos de facturación, eficiencia energética o vulnerabilidad». En él se contempla, por ejemplo, que el voluntariado comprende también la participación de jubilados ex trabajadores de la empresa.