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Instapaper, vendida a Pinterest por una cifra no revelada

Esta herramienta permite guardar y marcar contenidos para leerlos a posteriori y destaca por su capacidad multiplataforma

Instapaper, vendida a Pinterest por una cifra no revelada
Instapaper, vendida a Pinterest por una cifra no reveladalarazon

Pinterest ha puesto el ojo y la cartera en una decana de los markets de aplicaciones. La red social de imágenes ha comunicado la compra de Instapaper, sin revelar la cuantía de la operación. Esta herramienta permite guardar y marcar contenidos para leerlos a posteriori y destaca por su capacidad multiplataforma, teniendo versiones en iOS, Android y Kindle, soporte para smartphones, tablets y ereaders y ofreciendo la posibilidad de leer noticias seleccionadas de unos a otros.

La adquisición no va a suponer el fin de Instapaper, al menos por el momento. Su equipo actual la mantendrá viva y seguirá actualizándola pese a que también se dedicarán a mejorar el elemento ‘core’ de Pinterest. Lo que no sobrevivirá será el producto de desarrollo Instaparser. El próximo 1 de noviembre será su canto de cisne.

“Para ti, usuario final y cliente de Instapaper cliente, nada cambia. Nuestro equipo se muda de Betaworks en la ciudad de Nueva York a la sede de Pinterest en San Francisco y vamos a seguir haciendo Instapaper un gran lugar para guardar y leer artículos”, aseguran en el blog de la aplicación.

Instapaper empezó como un simple servicio web en 2007. Se trata de toda una veterana en el ámbito mobile que fue creada como aplicación en 2008 por Marco Arment, constituyéndose como una de las herramientas más populares para el iPhone en los primeros pasos de la App Store.

En 2013 la incubadora de startups Betaworks le compró a Arment una participación mayoritaria por una cantidad no determinada.

Instapaper ha tenido que enfrentarse en los últimos años al auge de apps de lectura de noticias y a la entrada de gigantes como Facebook o Twitter en este negocio. Entre sus principales rivales destacan Pocket, Readability, Evernote Clearly o Readkit. Para competir con ellos se vio obligada a abandonar su modelo de pago y pasarse a uno freemium en 2014.