Tecnología militar
China revela cómo será el bombardero furtivo H-20 que rivalizará con el B-21 Raider de Estados Unidos
El país asiático espera fortalecer su tríada nuclear con este bombardero, del que se especula un alcance de 8.500 km
El H-20, el primer bombardero estratégico dedicado de China, arrancó su desarrollo en la primera década de este siglo. En 2016, la Fuerza Aérea del Ejército de Liberación del Pueblo reveló la existencia del proyecto y, desde entonces, se ha filtrado alguna imagen junto a diversos diseños del avión. En 2022, medios chinos publicaron que el H-20 estaba cerca de realizar su vuelo inaugural y el pasado marzo Wang Wei, vicecomandante del mismo cuerpo militar, afirmó que el bombardero sería revelado 'muy pronto'. Ahora, China ha publicado por primera vez la imagen del diseño conceptual del H-20, un bombardero diseñado para fortalecer la tríada nuclear china y enfrentar el dominio aéreo de Estados Unidos, que próximamente desplegará el bombardero furtivo B-21 Raider.
Se espera que el H-20 sea uno de los activos más avanzados en el arsenal estratégico de China. Aunque los detalles técnicos específicos permanecen clasificados, se conoce que ha sido diseñado para tener un gran alcance, capacidad de carga y capacidad de supervivencia en entornos disputados. La imagen conceptual publicada muestra un diseño de ala volante similar al de los bombarderos furtivos estadounidenses, como el B-2 Spirit y el B-21 Raider. Esta forma minimiza la visibilidad en el radar y lo hace apropiado para misiones de penetración profunda en entornos hostiles, con el objetivo de evadir la detección de sistemas avanzados de radar y misiles.
A diferencia de los actuales bombarderos de la serie H-6 de China, que se basan en un diseño soviético antiguo y han sido modernizados a lo largo de los años, el H-20 es un diseño propio capaz de transportar tanto cargas nucleares como convencionales a muy grandes distancias.
El diseño del H-20 se ha presentado mientras Estados Unidos continúa el desarrollo del B-21 Raider, su esperado bombardero furtivo de próxima generación que reemplazará a su flota de bombarderos B-1 y B-2. El B-21, previsto para entrar en servicio a mediados de la década de 2020, incorpora tecnología furtiva de vanguardia, una arquitectura modular para futuras actualizaciones y amplias opciones de carga. Si el H-20 puede igualar las capacidades del B-21, China obtendría una capacidad operativa mucho más significativa en misiones de bombardeo estratégico y ataques de largo alcance que le permitiría operar en regiones tradicionalmente dominadas por fuerzas estadounidenses y aliadas.
Aunque las especificaciones exactas del H-20 no se conocen, se ha especulado un rango operativo de hasta 8.500 km. Este alcance le permitiría atacar objetivos en toda la región del Indo-Pacífico y más allá. Además, se espera que el H-20 transporte una carga que podría incluir, además de municiones nucleares y convencionales, misiles de crucero de largo alcance.
El diseño de ala volante pone de manifiesto el énfasis en la furtividad. Según expertos militares, incluye materiales absorbentes de radar (RAM, por sus siglas en inglés) y tomas de aire de bajo perfil para minimizar la sección transversal de radar. También se esperan sistemas avanzados de aviónica y guerra electrónica, mejorando la conciencia situacional del bombardero y permitiendo ataques coordinados junto con otros activos aéreos, terrestres o marítimos. Su capacidad de carga sería de 10 toneladas.
Estados Unidos, sin embargo, no expresa preocupación por los avances de China en el desarrollo de su bombardero estratégico. La semana pasada, un funcionario de defensa señaló que el H-20 ejemplifica el deseo de China de ser considerada una potencia militar superior. Pero poseer el bombardero furtivo 'no significa necesariamente que realmente le brinde [a Pekín] el tipo de capacidad que necesitarían o en la cantidad que necesitarían', según recoge National Interest.