¿Cuántos misiles simultáneos quebrarían la Cúpula de Hierro de Israel?

La tecnología detrás de la Cúpula de Hierro, el sistema de defensa de Israel, es muy compleja. Y altamente efectiva de acuerdo con sus recientes (y pasadas) pruebas: un conjunto de misiles y drones (cerca de 800) han intentado sobrepasarla recientemente. La tasa de éxito que señala es del 90%. Pero la pregunta clave es ¿cuántos misiles simultáneos podrían romper esa efectividad?

Vamos por pasos. Básicamente, Iron Dome está formado por un sistema de anillos concéntricos que se extiende desde los 4 a los 70 km de distancia y 10 km de altura, aunque el objetivo es ampliarlo hasta los 250 km. La tecnología se basa en tres pasos fundamentales. El primero es el uso de radares para detectar cualquier posible amenaza. El segundo es el uso de complejos algoritmos que permiten identificar y predecir la trayectoria de misiles, drones y cohetes que se acercan a las ciudades protegidas por la cúpula. Y finalmente están los misiles interceptores, responsables de evitar que la amenaza llegue a destino.

Aunque se habla en singular, la realidad es que Israel cuenta con 10 sistemas Cúpula de Hierro desplegados en todo el país. Cada una de estas baterías puede defender hasta 155 kilómetros cuadrados y están estratégicamente ubicadas alrededor de ciudades y zonas pobladas.

Una sola batería incluye de tres a cuatro lanzadores, y cada uno puede albergar hasta 20 interceptores. Es esto lo que determina la capacidad de defensa del sistema. Por ejemplo, en 2023 Hizbulah afirmó haber lanzado alrededor de 5.000 cohetes contra Israel en unos 20 minutos. Las cifras del ejército israelí hablaban de 2.200. Aunque se trate de esta última opción, estamos hablando de un sistema que, en el mejor de los casos, descartando misiles que fallan, aquellos que caen en zonas despobladas o en el mar, permite interceptar más de 1.000 ataques simultáneos… algo que implica contar con otros tantos misiles interceptores.

Teniendo esto en cuenta, la realidad es que no hay un número específico. Es necesario comprender que el Iron Dome no es un solo interceptor, sino un sistema de radar, gestión de batalla y lanzamisiles.

Si bien tiene una alta tasa de intercepción, no es 100 % efectivo, y el número exacto de intercepciones exitosas depende de varios factores, como el tipo de proyectiles, la densidad del ataque y la capacidad del sistema para rastrear y priorizar objetivos.

También hay que destacar que el sistema se actualiza constantemente y sus capacidades están en evolución permanente… Al igual que las amenazas a las que se enfrenta.

Dicho esto, no existe un número específico de amenazas que garantice la saturación del sistema, lo que sí está claro es que no es perfecto y sin duda ha sido programado para anular las amenazas de mayor a menor, pero muchas de estas últimas pueden afectar directamente sus capacidades.