Walking Tech

Hay tecnologías que están entre nosotros, pero ya están muertas. Y no lo saben. Son zombies que seguimos usando, pero tienen los días contados

Ya hay más teléfonos móviles que habitantes en el planeta. Entre el año 2000 y 2016 los usuarios de internet aumentaron a nivel mundial casi un 1.000% y hoy más de la mitad de los habitantes del globo se conectan a la red. En 2010 debutaban el iPad y Square, una herramienta para pagos digitales. Seis años más tarde, todo ha cambiado y apenas si somos conscientes de ello. Pero si echamos la vista atrás, podremos mirar hacia adelante y descubrir qué tecnologías y dispositivos tienen los días contados.

LA CLAVE ES QUE NO HABRÁ CLAVES

Los teléfonos móviles tienen detectores de huellas, los portátiles y las tablets, cámaras cuyo software no puede ser engañado por una foto. ¿Tiene sentido que todavía usemos una contraseña para acceder a redes sociales, correo electrónico, banca on-line, etc.? La tecnología biométrica ha avanzado lo suficiente como para evitar que sea imprescindible recordar las 19 contraseñas que GData asegura tiene cada persona, en promedio.

MONEY, MONEY

Un reciente informe de FirstData señala que el 94% de los menores de 35 años utilizan la banca on-line y una quinta parte de ellos jamás ha escrito un cheque físico. La mayoría de las entidades bancarias son conscientes de ello y han creado productos nuevos. Algunos permiten enviar un mensaje de texto que se convierte en dinero, como Twyp, directamente en el móvil. Ya es posible pagar con Apple Pay o Samsung Pay por casi cualquier servicio y Venmo facilita la opción de dividir el precio de una cena entre amigos. Así, los cajeros automáticos primero y el dinero en papel, poco tiempo después, desaparecerán pronto o serán de uso muy esporádico en viajes a destinos en los que un souvenir es un sinónimo de regateo.

DILE ADIÓS AL USB

Todos recordamos aquella nostálgica época en la que comenzamos a hablar de la Nube y los 25 GB de memoria gratuita nos parecían una cantidad enorme. Actualmente Apple, Box, Dropbox, Google o Microsoft ofrecen servicios de almacenamiento sin límite. De este modo, la Nube se convirtió en el diamante de nuestros archivos: es para siempre. Un CD (sí, hay quienes aún los usan) se puede rayar, un pen drive estropearse, pero la Nube está en todas partes y es de fácil acceso. En cualquier dispositivo. Lo único que hay que pensar es qué nos regalarán en las conferencias a partir del año que viene.

AQUí MANDO YO

A principios de año, el inversor y desarrollador más importante de televisores 3D, Samsung, anunció que abandonaba esa versión para centrarse en profundizar en las capacidades de sus Smart TV. Apple tiene su propia central de entretenimiento con Apple TV y luego están todos los servicios de series y eventos on-line, Netflix a la cabeza, seguida de Hulu, CloudLoud o Amazon, entre otras. Muchas de ellas incluyen no sólo series o películas, también eventos deportivos y hasta videojuegos. Así, a medida que la tele se hace más inteligente y conectada, es lógico que el medio más útil para controlar las opciones sea un smartphone (el clavo en el ataúd de los mandos a distancia) con las ventajas obvias de compatibilidad, personalización (cada teléfono del hogar puede estar programado para que la tele reconozca al usuario) y la gran ventaja de que es casi imposible perderlo.

Ya no basta con ser portátil: hay que ser versátil

En marzo de este año, Toshiba anunció que abando-naba la producción de sus portátiles habituales para el consumidor (algo que Sony hizo en 2014) y se centraba en los modelos Portégé y Tecra (pantalla táctil y plegable y giratoria), a nadie le sorprendió. Las tablets, como tal, y los portátiles, per se, van a desaparecer y se fusionarán en una tecnología como la que ofrece Microsoft con Yoga, que logra reunir lo mejor de ambos mundos con accesorios para cada propietario. ¿Para qué comprar una cámara digital de bolsillo si tienes un smartphone? ¿Qué sentido tiene un mp3 o una grabadora de voz si en los teléfonos móviles ya existen estas opciones? Pues lo mismo.

HAN SALTADO LOS CABLES

Cada vez son más las marcas que proponen la carga por inducción. Los proyectos de grandes compañías y de inventores independientes en Kickstarter o Indiegogo para crear fundas con baterías solares marcan el principio del fin para los cargadores de smartphones y tablets. Gracias a ello, los cables, la dificultad de encontrar adaptadores en diferentes países y las roturas o deterioros de estos adminículos «cargados por el diablo», desaparecerán también en breve.

UN JUEGO DE NIÑOS

En breve nos sorprenderemos de que algún día los videojuegos se vendieran en formato físico. No falta mucho para que los estudios especializados comiencen a crear paquetes de suscripción para jugar on-line a cualquiera de sus creaciones. Esto dará una mayor libertad a los fabricantes de consolas, que no necesitarán espacio para lectores y podrán, a través de la conectividad 5G, aumentar el procesamiento de gráficos, los accesorios y las prestaciones. Un plus es que las actualizaciones o futuras versiones de los juegos se realizarán casi en directo y el producto aumentará en calidad y jugabilidad casi a diario.