Wildbytes: un generador de experiencias para conectar a marcas y clientes

a era del coleccionismo de objetos pasó. Hoy en día las personas nos dedicamos a coleccionar experiencias, que son la nueva moneda de cambio». Son palabras de Julio Obelleiro, cofundador y CEO de Wildbytes, una agencia de innovación que también incuba productos relacionados con la creación de experiencias.

Esta empresa se dedica a diseñar y producir experiencias disruptivas a través de usos creativos de nuevas tecnologías para lanzamientos de producto, activaciones de marca, e instalaciones en espacios retail. La principal idea de fondo fue la creación de experiencias tecnológicas capaces de sorprender al público, como si de un efecto de magia se tratara que permitiera vivir algo que no se haya vivido antes.

Con presencia en Madrid, Barcelona y Nueva York, Wildbytes tiene detrás una plantilla heterogénea conformada por profesionales de muy diversa índole. Todos los empleados atesoran una amplia experiencia en ámbitos tan dispares como el de la tecnología, la producción audiovisual, los contenidos, el retail y, por supuesto, el marketing y la publicidad.

Su ritmo de crecimiento anual oscila en torno al 80%, lo que demuestra que «estamos en la era de lo experiencial». Obelleiro relata que los primeros años de vida de Wildbytes fueron de especialización, y no de crecimiento, y que en ellos se centraron en crear proyectos de repercusión mundial y no tanto en hacer escalar las cifras de negocio, que actualmente se ven favorecidas por la reputación que han logrado en el mundo publicitario y del retail experiencial.

Principales hitos

El CEO cree que los principales hitos que han logrado vienen de proyectos en los que han conseguido verdaderos avances o «breakthroughs» en el campo de la innovación experiencial y que, asimismo, han generado millones de impresiones, «precisamente por ser innovadores».

Entre ellos, Obelleiro destaca la creación de la primera pantalla interactiva de realidad aumentada instalada en Times Square en Nueva York para la marca de moda Forever21, y que estuvo durante cinco años activa como consecuencia del éxito que generó. De igual modo, en el emblemático e incansablemente visitado corazón de Manhattan, hace poco vio la luz la nueva pantalla de Coca-Cola, que se trata de «la primera de tipo robótica del mundo y en la que somos parte de las patentes de invención», cuenta.

También crearon, junto a Fox International Channels en Madrid, la primera experiencia de realidad aumentada cinemática del mundo, que logró medio millón de visitas en las primeras 48 horas.

En este sentido, el CEO de Wildbytes se vanagloria de haber sido pionero en el campo de las performance tecnológicas, creando con Sephora el primer vídeo «mapping» facial en vivo para el lanzamiento de la marca Kat Von D Beauty, que llegó a los 100 millones de impresiones on-line; así como de haber llevado a cabo el lanzamiento de la marca Fenty Beauty
de Rihanna en varios países, logrando más de 1.700 millones de impresiones en el proceso.

Además de Obelleiro, en Wildbytes trabajan Casilda Sánchez, Daniel Torrico, Andrés Yves, Laia Zanon y Guillem Castellvi. Pues bien, hace un año arrancaron una nueva división de producto en la compañía que la convierte en un «venture builder» en paralelo a Wildbytes como agencia de innovación. «Estamos en fase de atraer inversión a esta nueva división, pero parece que en muy poco tiempo sumará cifras interesantes al total de facturación de Wildbytes», revela el CEO.

En cualquier caso, y al margen de cifras, Obelleiro remarca que, a nivel conceptual, el objetivo de Wildbytes es crear experiencias que generen impacto y produzcan emociones. «Estas sensaciones son las que provocan verdaderas conexiones entre las marcas y el público», apuntilla.

ROMPIENDO ESTEREOTIPOS

Wildbytes, en su última campaña para New Balance, caza excepciones de moda en tiempo real para romper con los estereotipos. Y es que la compañía ha desarrollado un software de inteligencia artificial que, haciendo uso del «machine learning», es capaz de detectar y registrar los estilos mayoritarios a la hora de vestirse en un determinado lugar para finalmente identificar y empoderar a las singularidades. De esta manera, tras grabar imágenes y emitirlas en una pantalla –en la de Callao City Lights, en el caso de la campaña de New Balance–, enaltecen a los que no siguen los mismos hábitos y costumbres, quienes al mismo tiempo disfrutarán de esa experiencia que tantos vínculos puede generar entre clientes y marcas.