Morante, El Juli y Perera: pelea de gallos al mágico abrigo de Ronda

Llegó el día. Ronda volverá a vestir mañana sus mejores galas para convertir su mágico enclave, cuna de toreros de leyenda, en epicentro del universo taurino. Aroma añejo en un marco incomparable. Serpenteando la serranía, al filo de su aguijarrado y espectacular Tajo, la vereda se abrirá hasta el centenario coso de La Maestranza. Un cartel de muchos kilates para celebrar la LVIII edición de su Tradicional Corrida Goyesca. ¿Conseguir una entrada? Es una quimera. El lleno de «No hay billetes», asegurado. Morante de la Puebla, El Juli y Miguel Ángel Perera. Tres figuras tres para soñar el toreo y acariciar la gloria que tantos mitos saborearon en la única feria del calendario que lleva el nombre de un torero: Pedro Romero.

La cita dará comienzo a las cinco y media de la tarde, pero desde antes, desde primera hora de la mañana, Ronda volverá a empaparse de Fiesta. La posible inundación queda en manos de la terna y del ganado, que lucirá en los costillares el hierro de Zalduendo. Tres de ese ahora enquistado G-5 en el mismo patio de cuadrillas. Fieles a la tradición, los tres volverán a llegar al coso en calesa escoltados por sus cuadrillas.

Como suele ser habitual, el cartel ha despertado la máxima expectación. Se espera el desembarco de numerosos VIP, entre los que uno brillará con luz propia. El Premio Nobel Mario Vargas Llosa, gran aficionado, confirmó hace unas semanas su asistencia al festejo.

En la retina de los aficionados todavía sigue impertérrita la antología capotera que dibujó hace exactamente un año Morante de la Puebla en este mismo escenario. Quien más quien menos soñará esta noche con otro nuevo tercio de banderillas como el de esa encerrona en la que una silla, dos banderillas cortas y puñados de talento sevillano embrujaron Ronda. El de La Puebla abrirá terna. Su presencia, como la de El Juli, ya estaba confirmada desde febrero. Ambos nos lo cantaron en sus respectivas presentaciones de sus temporadas.

El hueco que quedaba por desvelar fue para Perera. Incontestable. Un puesto ganado a ley durante toda la temporada en cada paseíllo desde que rindió Madrid a sus pies cortando cinco orejas en dos tardes y encadenar así dos Puertas Grandes. Ingredientes de lujo para una gran tarde de toros. Sevillano, madrileño y extremeño pondrán el cetro y su propia vida en juego para lograrlo. La Maestranza de Caballería y su leyenda bien merecen el esfuerzo. Fragancia rondeña.