Medios de Comunicación

Más de 5.000 mujeres periodistas secundan ya el manifiesto contra el machismo

Gracias a la mensajería instantánea y a las redes sociales, las reivindicaciones del manifiesto, bajo el lema "Las periodistas paramos", se han extendido con gran rapidez

Más de 5.000 mujeres periodistas secundan ya el manifiesto contra el machismo
Más de 5.000 mujeres periodistas secundan ya el manifiesto contra el machismolarazon

Ya son más 5.000 las mujeres periodistas que han apoyado desde el pasado jueves el manifiesto contra el machismo y la desigualdad en los medios de comunicación y han hecho un llamamiento a las profesionales de todo el país a sumarse "en la medida de sus posibilidades"a la huelga del 8 de marzo.

Las inquietudes de un pequeño y heterogéneo grupo de informadoras que decidieron citarse a principios de esta semana para hablar de la desigualdad existente en la profesión ha derivado en un movimiento reivindicativo y organizativo de mujeres que no tiene precedentes en España.

Gracias a la mensajería instantánea y a las redes sociales, las reivindicaciones del manifiesto -bajo el lema "Las periodistas paramos"- se han extendido con gran rapidez y han logrado convencer a miles de periodistas: famosas y poco conocidas, en paro y jubiladas, trabajadoras de medios o de gabinetes de comunicación.

► Las periodistas paramos

Ana Rosa Quintana, Susanna Griso, Pepa Bueno, Ana Pastor, Almudena Ariza, Macarena Berlín, Mara Torres, Àngels Barceló, Rosa Montero, Rosa María Calaf, Maruja Torres, Soledad Gallego-Díaz, Victoria Prego son algunas de las comunicadoras que han secundado el documento cuyo mensaje incide en que "el feminismo también es necesario para mejorar el periodismo".

La iniciativa, que nació de forma espontánea y casual entre un grupo de informadoras, pretende denunciar la brecha salarial, el techo de cristal, la precariedad, la inseguridad laboral y el acoso sexual y laboral que sufren las periodistas en los medios de comunicación, así como los sesgos informativos.

"El objetivo es expresar nuestro rechazo al machismo que existe en el sector y que se manifiesta de muchas maneras diferentes. Creíamos que era el momento para que esta efervescencia feminista llegara también a los medios de comunicación y se materializara en reivindicaciones", explicó una de las promotoras del manifiesto, la periodista de eldiario.es Ana Requena.

Según reza el manifiesto, “todas sufrimos el mismo machismo que las mujeres del resto de sectores –precariedad, inseguridad laboral, brecha salarial, techo de cristal, acoso sexual o ninguneos– pero con las particularidades asociadas a nuestra profesión. Somos conscientes de la relevancia social de nuestro trabajo y, por eso, mostramos también nuestra preocupación por la visión parcial de la realidad que tantas veces ofrecen los medios y en la que falta la presencia y aportaciones de las mujeres. El feminismo también es necesario para mejorar el periodismo. Por eso, en este 8 de marzo exigimos a los medios de comunicación y empresas periodísticas que tengan en cuenta nuestras reivindicaciones:

1. La brecha salarial es una realidad en nuestro sector. Exigimos a las empresas transparencia salarial y una revisión de categorías, complementos y criterios profesionales que permitan acabar con ella.

2. Techo de cristal. Las direcciones de los medios y empresas periodísticas están copadas por hombres. Reivindicamos nuestro derecho a ocupar puestos de poder y responsabilidad y a que se nos tenga en cuenta en las promociones profesionales para puestos intermedios.

3. Precariedad. Sufrimos niveles de temporalidad superiores a los de nuestros compañeros. De la misma manera denunciamos la inestabilidad laboral de las compañeras freelance y de las falsas autónomas, una situación de precariedad que se ha hecho habitual en los últimos años.

4. Corresponsabilidad y cuidados. Denunciamos que las dinámicas de trabajo priorizan el presentismo y la libre disposición y son ajenas a las necesidades de cuidado que tienen todas las personas. Creemos que la corresponsabilidad y la flexibilidad no debe ser un asunto de buena voluntad sino una prioridad que las empresas deben asumir para que estas tareas se repartan por igual entre mujeres y hombres. Como en otros sectores, una ausencia de conciliación real perjudica más a las mujeres, que acaban modificando o recortando sus horarios para poder cuidar e incluso abandonando su empleo o cambiando de profesión.

5. Acoso sexual y laboral. Son muchas las periodistas que han sufrido por parte de compañeros y superiores, pero también de fuentes, situaciones de acoso sexual. Por otro lado, el ninguneo, la condescendencia, el paternalismo y los mansplaining están a la orden del día en las redacciones y fuera de ellas, en nuestra actividad diaria. Como profesionales de la comunicación sufrimos acoso online, además de comentarios violentos y machistas en nuestras piezas

6. Los espacios de opinión y las tertulias están masculinizados. Hay más que suficientes mujeres periodistas y expertas que pueden equilibrar esos espacios.

7. Mirada parcial y preocupación por los enfoques. Todas estas brechas que sufrimos las periodistas tienen consecuencias, también en los contenidos y en los enfoques de los medios de comunicación. La visión de la realidad que transmiten es muchas veces parcial y está sesgada porque no tiene en cuenta en la misma medida las experiencias, los relatos y las vivencias de las mujeres que, a menudo, son tratadas como personajes secundarios o con estereotipos. Un ejemplo es el tratamiento de la violencia machista, que en muchas ocasiones sigue culpabilizando a la víctima. Las primeras páginas, las aperturas de medios e informativos son decididas por hombres.

Instamos a la audiencia y a lectores y lectoras a ser cómplices de nuestras demandas. Las mujeres firmantes de este manifiesto lo hacen a título individual y no queremos que ningún partido político, sindicato o medio de comunicación se apropie de nuestras reivindicaciones”.

El manifiesto quiere evidenciar las dificultades de las mujeres para llegar a puestos de dirección en las redacciones, que cobran menos que ellos, que su tasa de temporalidad es superior, y la falta de flexibilidad y la complejidad para la conciliación en el sector.

Asimismo, denuncia que las tertulias y el ámbito de la opinión están "masculinizados"y que la mirada de los medios es sesgada y parcial porque la mujer está infrarrepresentada en los contenidos periodísticos.

Además, las informadoras acudirán agrupadas ese día a la manifestación feminista del día 8 y ya hablan de crear una asociación de mujeres informadoras.

Para la presidenta de la FAPE, Elsa González, este movimiento reivindicativo y organizativo de mujeres periodistas sin precedentes en España es un "logro importante".

"A mi juicio, lo importante no es la huelga si no la movilización", ha dicho a Efe González, que ha subrayado que desde la FAPE se ha tratado de denunciar "permanentemente"la situación "injusta"que vive la mujer dentro del periodismo y "que debe cambiar".