Natalia Verbeke, un «pájaro enjaulado»

La protagonista del próximo «thriller» de Antena 3, «El nudo», pelea por salir de un mundo que la oprime.

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atalia Verbeke se ha vestido con las pieles de Cristina Arias. El personaje que interpretará en la nueva serie producida por Atresmedia Televisión en colaboración con Diagonal TV, «El nudo», narra la historia de una jaula con barrotes transparentes. Una jaula que resulta familiar por la injusta pero irremediable razón de que la sociedad se cimenta sobre pilares que de alguna manera aíslan el papel de la mujer al cuidado de los niños y a la estabilidad familiar, en palabras de la actriz: «Cristina se dedicó a cuidar a los hijos y dejó su vida laboral, cosa que en este momento está intentando retomar porque los niños ya han crecido, cada uno tiene su vida y ella quiere volver a tener la suya». Y es que, ese «pájaro enjaulado» también tiene sueños y aspiraciones, sin embargo, «está el miedo y cuando da un paso, luego da dos para atrás». Lo que resulta evidente es que el personaje protagonista encarnado por Verbeke representa un conjunto de sensaciones fieles a la realidad, «No hay tantas series que hablen de lo que nos pasa a partir de los 40 y eso como cuarentona, me interesa contarlo. Lo puedo entender mucho más en este momento», afirma entre risas.

La nueva ficción que verá la luz a través del canal líder del Grupo Atresmedia, Antena 3, cuenta con ese toque de realidad que aporta la inexistencia de platós artificiales.«Hacía tiempo que no trabajaba al aire libre. Es una suerte no tener un plató y un lujo estar en el lugar concreto. El resultado es increíble», alega la actriz. Las afueras de la ciudad de Madrid se han convertido durante el rodaje del «thriller» en el escenario principal de esta historia entrelazada.

Dos parejas pertenecientes a dos mundos opuestos mantienen una relación tan fuerte como inestable, repleta de afecto, amistad pero también de secretos. Un intercambio de dudas existenciales y del miedo imperante que supone la salida, a veces necesaria, de la zona de confort. En definitiva, «trata de dos maneras muy distintas de ver la vida, dos situaciones económicas diferentes y de cómo todas esas desemejanzas pueden afectar en todo y por supuesto, en la amistad».

No obstante, no se trata de una serie pedagógica, tal y como afirma Verbeke: «Hace un retrato de lo que ocurre en la vida. El ser humano cambia y lo que te plantea la serie es: esto es lo que hay y esto es lo que puede ocurrir. El propio espectador toma sus propias conclusiones y la mirada puede cambiar dependiendo de la persona».

Saltos en el tiempo

Lo fascinante de «El nudo», además del excepcional reparto (Cristina Plazas, Oriol Tarrasón, Miquel Fernández, Luisa Gavasa, Enrique Villén...) es que la trama gira en torno a dos momentos temporales diferentes: el presente y el pasado, otorgando a la trama ese «velcro» mental, esa intriga insatisfecha y esos cálculos imposibles en busca de respuestas. Estos saltos en el tiempo hacen que la tarea de interpretar se vuelva aún más jugosa, tal y como sostiene la argentina:«Se mezclan constantemente, incluso en el rodaje. Uno tiene que ser muy consciente de la línea del personaje y del momento que vive en cada espacio de tiempo. Es uno de los atractivos de la serie, y para nosotros también».

Jordi Frades es el nombre del director y el encargado de impulsar este proyecto basado en la conocida serie de origen argentino «Amar después de amar», estrenada en 2017 y que logró hacerse con la cúspide de la audiencia. A pesar de esto, la entrevistada afirma: «Prefiero no verla para no recibir influencias de manera inconsciente», coincidiendo con la opinión del resto de compañeros de reparto.

Esta nueva apuesta alarga la lista de las colaboraciones del Grupo con Diagonal TV. Anteriormente, el trabajo conjunto de ambas ha dado como resultado otras grandes producciones entre las que se encuentran «Matadero», «La catedral del Mar», «Sin identidad» y «Amar es para siempre», lo que le ha permitido a Atresmedia posicionarse como referente en cuanto a la creación y producción de ficciones.