Alojarse en lugares diferentes

Dormir en una torre de un edificio gótico de Londres o en un molino en una isla del mar Egeo es una experiencia única. Hay numerosos lugares diferentes para hacer una escapada.

Son lugares extraños, inusuales y misteriosos pero cada vez están más de moda como opción para pasar el fin de semana y experimentar nuevas sensaciones. Dormir en el interior de una torre de reloj, en los aledaños de un molino de viento o rozando los muros de un castillo son experiencias curiosas asequibles para todos los bolsillos.

Suite en una torre de reloj en Londres

Hace unos siglos cumplían una función esencial. Las torres de reloj se situaban en lugares muy concurridos con el objetivo de transmitir la hora a una sociedad que carecía de relojes hasta mediados del siglo XX. Pero ahora, además de eso, tienen una nueva utilidad. St. Pancras es un barrio de Londres que se encuentra dentro de Camden y es muy famoso por su estación de ferrocarril. En este mismo lugar, Wimdu ofrece una suite en la torre del reloj del edificio gótico de la estación. En ella encontrarás una habitación con cama doble para dos personas a diez metros de altura, desde la que se puede divisar muchos monumentos de Londres, como la Catedral de San Pablo. Está a poca distancia a pie de muchos lugares de interés de Londres, como la Biblioteca Británica el Museo Británico y el West End.

Un paraíso en un molino de las islas del mar Egeo

No es de extrañar que el ingenioso Don Quijote de la Mancha los confundiera con gigantes. Alojarse en un molino de viento es un escape de la realidad y un viaje a la fantasía. Por ello, Wimdu ofrece un alojamiento insólito en uno de los lugares más bellos del mundo, la mágica Santorini (Grecia). Las pequeñas ventanas luminosas del molino ofrecen una vista panorámica preciosa a los viñedos de la zona. En lo más alto del edificio se encuentra la habitación más cómoda. Sus paredes circulares y un dormitorio romántico te harán desconectar al máximo. El complejo tiene dos dormitorios y es apto para seis personas.

Dormir en los muros del Castillo San Jorge de Lisboa

El Castillo de San Jorge se encuentra en una de las colinas más altas del centro de Lisboa (Portugal), proporcionando a los visitantes una de las vistas más bellas sobre la ciudad y el río Tajo. Durante siglos sirvió de fortaleza a diferentes civilizaciones y protegió la antigua ciudadela árabe o Alcázar. En este enclave único, Wimdu te ofrece un apartamento de dos habitaciones, situado en los aledaños de los muros del castillo, proporcionando una sensación de tranquilidad y paz a aquellos que quieran sentir los vestigios de la historia. Desde 40 euros la noche, esta vivienda renovada, apta para cuatro personas, te hará revivir un fin de semana medieval con todas las comodidades.

Una estancia sobre un canal de Ámsterdam

Dormir en una casa barco sobre un canal de Ámsterdam es una experiencia sublime, pero todavía lo es más si se hace en uno del centro de la capital. Wimdu recomienda esta casa flotante a bordo del “El Keizerin”, un alojamiento ubicado en la Nieuwe Keizersgracht, muy cerca del Hermitage, la plaza Waterloo y el Teatro Real Carré. Esta pieza excepcional formó parte de un Gronginger Bol, un barco de acero de 1904, que ha servido durante mucho tiempo como carguero. Además de la nave, han sobrevivido algunos detalles de la embarcación que podrás observar en un ambiente íntimo desde 107 euros por noche.

Una villa italiana de película

Situado en la famosa península Gaeta (Italia), Wimdu nos recomienda una parada en esta villa en la que se grabó una parte de la película de James Bond "Casino Royale". Una estancia llena de aventura te espera en este edificio de piedra muy singular. Altamente recomendable es desayunar en su terraza privada, donde disfrutarás de unas vistas al lago inigualables. Además, podrás llegar rápidamente en coche o en bici hasta la ciudad de Menaggio para explorar este pintoresco lugar con sus encantadoras plazas, cafés y tiendas. También existe la opción de hacer excursiones culturales y actividades como senderismo, ciclismo, tenis o paseos a caballo. Desde 260 euros por noche podrás pasear por los lugares que pisó el agente secreto más famoso de la gran pantalla.