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Increíble persecución policial a un anciano en scooter eléctrica
Dos agentes intentaron dar al alto a un hombre de 60 años para advertirle de que circulaba a una “velocidad peligrosa”, pero les fue imposible
Dos agentes intentaron dar al alto a un hombre de 60 años para advertirle de que circulaba a una “velocidad peligrosa”, pero les fue imposible
Dos agentes de la policía de Nueva Zelanda se han enfrentado a la que posiblemente haya sido la persecución más surrealista que han vivido. La patrulla ha perseguido a un anciano, Charlie Durham, que huía en un carrito eléctrico.
El pasado miércoles, dos policías de la ciudad de Timaru, divisaron a un hombre de unos 60 años, con las piernas amputadas, que circulaba a “una velocidad peligrosa” por una de las aceras de la ciudad. En ese momento decidieron darle el alto para advertirle de los peligros de circular a esa velocidad pero en ese momento el hombre comenzó a huir de ellos.
En el vídeo se puede ver como el hombre hace caso omiso a la sirena del coche de policía y consigue escabullirse varias veces, cambiándose de carril y esquivando los coches “a toda velocidad”. En más de una ocasión podemos ver como cruzan el coche intentando detenerle pero lo esquiva y continúa su huida.
Durham he recibido dos multas una por utilizar el vehículo eléctrico de movilidad personal “desconsideradamente” y otro por no detenerse ante la policía. Ambas multas ascienden a 250 dólares neozelandeses, lo que es lo mismo que mas o menos 145 euros.
El anciano, ha declarado a un medio local, que no se detuvo porque pensaba que el coche de la policía era una “camioneta de helados que intentaba venderle un helado”. Ha insistido también en que “hay todo tipo de cosas que la policía podría estar haciendo en lugar de perseguirme”.
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