3 hoteles donde refugiarse y simplemente disfrutar

Hay veces en las que necesitamos alejarnos de todo, conectar con nosotros mismos y de nuevo, a la vuelta, volver a encajar la realidad, la rutina, la vida. Y no hay nada como viajar para darse cuenta. Hoy os proponemos estos tres hoteles perfectos para una escapada, tres refugios que bien por su ubicación, su trato o sus instalaciones, nos hacen, así de fácil, sentir bien. Y todos queremos, claro, sentirnos bien. Pues a preparar las maletas.

Hostal Empuries: con un emplazamiento único junto a las ruinas greco-romanas de Empúries y en primera línea de la preciosa playa del Portitxol, este hotel es además de un refugio perfecto, un ejemplo de alojamiento sostenible, empeñado en mejorar el mundo en el que vivimos y compartimos. Sus 34 habitaciones, repartidas en vistas al mar y vistas al jardín, son tan sencillas como acogedoras, incluso algunas de ellas, sobre todo las del edificio histórico, pecan de austeras. No pasa nada, todo se compensa con las impresionantes vistas al mar de las que goza. Su apuesta gastronómica y su spa son dos, además de su ubicación, de sus puntos fuertes. El chef Rafa Peña firma la carta del restaurante Villa Teresita, donde se sirven deliciosos platos como el arroz de gamba. De día, el desayuno está listo en el Bistró del Mar, una ventana al mar con un paisaje que parece pintado para provocar el descanso.

Hotel La Escondida: ¿qué se puede esperar de un hotel con un nombre así? Pues un refugio rodeado de casi 200 hectáreas de olivos y bosques de almendros y unas impresionantes vistas. El hotel, propiedad del ex entrenador del Barcelona Terry Venables, se encuentra a situado a unos 30 minutos de Alicante, con el Parque Nacional de la Font Roja a pocos pasos. Queda confirmado pues que “los únicos sonidos que oirán tras una noche de sueño reparador serán las campanas y cencerros de los rebaños de cabras en la distancia”, algo que no se cansan de repetir sus orgullosos dueños, el matrimonio Venables. Un hotel donde el lujo se encuentra en los detalles, como los que hay en las 10 habitaciones de la casa principal, que data de 1881. Perfecto para una escapada de otoño por el increíble paisaje que rodea a este hotel, también tiene una piscina climatizada, el lugar ideal para liberar el estrés urbano y dejarlo flotando, al menos, hasta nuestra vuelta a la rutina.

Hotel Echaurren: no podía faltar una escapada de pleno disfrute en este listado de propuestas. Y desde luego La Rioja es perfecta tanto una escapada, como para disfrutar, y mucho (acción obligada en esta prolífica tierra). 25 habitaciones y un restaurante, el Portal del Echaurren, con dos estrellas Michelin, garantizan la estancia perfecta. Por si fuera poco, el hotel está ubicado en Ezcaray, uno de los pueblos más bonitos de La Rioja, donde además de largos paseos, también se puede subir a esquiar a Valdezcaray, la estación de esquí de la Comunidad. Comprar una manta de Mantas Ezcaray siempre es un buen plan; firmas como Loewe lo saben bien (y ahora tú también).