Ignacio López: «PP y Ciudadanos están montando sus campañas en una dimensión ‘fake’»

Tiene un rostro sereno, del que emerge una sonrisa fácil, tal vez recurso de tímido. Ignacio López habla sin trampas y con pocas florituras. Es uno de los no tantos «sanchistas» originarios y acumula café en sus venas, a ritmo de tres tazas diarias. En campaña y fuera de ella. Energía no le falta.

¿El PSOE debe arrepentirse de algo en el proceso que nos ha traído a nuevas elecciones?

Ha hecho lo que tenía que hacer, intentar sacar adelante una investidura y formar gobierno. Ha llegado hasta donde la responsabilidad le permitía.

¿No temen un resultado similar al de los anteriores comicios?

Confiamos en que haya una mayoría de ciudadanos que considere que es necesario sacar del bloqueo político a nuestro país y que, siendo el PSOE el único que va a poder gobernar y desde un programa serio, sensato y progresista, nos apoye para poder hacerlo de forma estable cuatro años.

Y si suma el bloque de la derecha, el PP quiere exportar a España el modelo andaluz...

Si suman las derechas habrá recortes en servicios públicos y en bienestar social. Cuando las derechas no suman se limitan a bloquear la posibilidad de que haya gobierno y cuando lo hacen, recortan en servicios públicos. Los españoles tienen en estas elecciones la oportunidad de desbloquear políticamente el país, lo tienen en su mano el domingo. Tienen que participar masivamente porque la abstención es la gran aliada del bloqueo que las derechas quieren.

Sánchez no quiso negar abiertamente en el debate de los candidatos que descartará el apoyo independentista, ¿por qué cree que lo hizo?

Sánchez no fue al debate a responder a Pablo Casado, sino a exponer su programa y sus ideas ante todos los españoles. No se trataba de un interrogatorio de Casado a Sánchez. Estamos en unas elecciones por no haber permitido que la gobernabilidad de España dependiera de los independentistas, por lo tanto ese temor no existe, lo hemos dejado claro. Los indecisos van a decidir que el PSOE pueda gobernar sin necesidad de que los independentistas sean determinantes. PP y Cs querían empujar al PSOE, con su actitud pasiva o su negativa a permitir el Gobierno de Sánchez, a pactar con los independentistas para denunciar después que gobernaba gracias a ellos. Han intentando esa maquiavélica cuadratura del círculo en una irresponsabilidad bastante importante y que es una incoherencia. Si no querían que España dependiera de los independentistas lo tenían bastante fácil.

Apoyando a Sánchez…

Sólo se les pedía la abstención. Ahora denuncian algo que no existe, pero para películas ya está el cine. Hablamos de algo serio, de qué va a pasar con nuestro país, y los españoles no se merecen estos teatros que monta la derecha. Los independentistas ya echaron para atrás los Presupuestos, con PP y Ciudadanos, y estamos ante otras elecciones porque no ha habido pacto con ellos.

Por eso y porque no se han entendido con el partido de Pablo Iglesias… ¿será posible a partir del 11-N?

Queremos gobernar desde la izquierda, para todos y desde una perspectiva progresista. Ése es el plan y nos lleva a tener un acuerdo de programa con las fuerzas de izquierda.

¿Eso incluye a Unidas Podemos y Más País?

Hasta que no haya resultados no sabemos qué sumas se darán, pero lo más fácil, programáticamente hablando, sería entenderse con fuerzas progresistas.

¿Les restará votos el partido de Errejón?

Más País es una escisión de Unidas Podemos y la lógica dice que los votos vendrán de ahí. Habrá que ver los escaños que consiguen.

Usted que lo conoce, ¿quiere Sánchez ser presidente a cualquier precio?

Ha quedado suficientemente claro que no. Si ese axioma hubiera sido cierto, no hubiéramos ido a elecciones en abril y ahora de nuevo. Esa afirmación no se sostiene más que en una realidad paralela. Decir eso es como insistir en que el caballo blanco de Santiago es negro o que Elvis sigue vivo. PP y Cs están montando sus campañas muy fuera de la realidad, en una dimensión que podríamos decir «fake». Es peligroso que líderes políticos traten de vendernos falsedades que parecen creerse.

El Govern catalán ha apoyado que la gente proteste el día de las elecciones, ¿les preocupa que se boicotee el 10-N?

Ya lo ha dicho el presidente, es un delito grave impedir que la gente vote. Aunque confío en que no se haga. Si hay insensatos que lo intentan, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado actuarán para permitir un derecho fundamental como es el de votar.

Tenemos Cataluña para rato…

El problema político de Cataluña no tiene solución a corto plazo porque es de convivencia. Lo han generado los líderes independentistas que han provocado una fractura social profunda. Lo que suceda dependerá de su actitud futura y de si en España tenemos un Gobierno que trate de buscar una solución, como es el caso del PSOE, o que azuce el asunto y nos lleve a un callejón sin salida, como harían las tres derechas. El objetivo debe ser relajar, destensar el conflicto para poder entrar en vías de solucionarlo.

Andalucía se ha convertido en un problema para el PSOE nacional, en arma para la oposición por la corrupción, lo destapado por el nuevo Gobierno regional... ¿son conscientes de que les queda trabajo por delante aquí?

En Andalucía vamos a sacar un magnífico resultado y la victoria en toda España se sustentará aquí. Quien tiene un problema son las tres derechas con todo el sector sanitario en pie de guerra por la mala gestión del PP. Mucha gente desconfía ya de un Gobierno que no lo hace bien.

¿Y el PSOE como oposición lo está haciendo bien?

Estamos denunciando toda la mala gestión y dándole voz a las personas descontentas que cada vez son más.

Es el cabeza de lista por Málaga, ¿qué hay que impulsar para su provincia?

Tratar de conseguir el mayor bienestar para sus trabajadores y pensionistas a través de la subida del salario mínimo y de las pensiones conforme al IPC, que se reduzcan las listas de espera de atención a las personas con dependencia, la estabilización de las playas de toda la costa y ejecutar el proyecto de los Baños del Carmen.