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Portabella recibe el Giraldillo de Honor en la inauguración del 16 Festival de Sevilla

Durante la gala se estrenó a nivel nacional la película «Madre», de Rodrigo Sorogoyen

La consejera de Cultura, Patricia del Pozo, y el delegado de Cultura del ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, junto a los actores que protagonizan «Madre», ayer en la inauguración del SEFF
La consejera de Cultura, Patricia del Pozo, y el delegado de Cultura del ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, junto a los actores que protagonizan «Madre», ayer en la inauguración del SEFFManuel OlmedoLa consejera de Cultura, Patricia del Pozo, y el delegado de Cultura del ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, junto a los actores que protagonizan «Madre», ayer en la inauguración del SEFF

La XVI edición del Festival de Sevilla, que se celebrará hasta el próximo 16 de noviembre, se inauguró ayer por la noche en una gala en la que se entregó el Giraldillo de Honor de esta edición a Pere Portabella y en la que se estrenó a nivel nacional la película «Madre», de Rodrigo Sorogoyen, tras el éxito arrollador de su anterior largometraje «El Reino», que ganó siete Premios Goya.

Pere Portabella, autor fuera de toda convención y con una obra adelantada a su tiempo, expresó en un encuentro con periodistas anterior a la inauguración que las películas no tienen final. «Mi labor como cineasta es proponer, para que sea el espectador quien resuelva con sus propias experiencias y necesidades. Hay quien requiere conocer el paisaje en un cuadro, pero es él quien se enfrenta a esa obra». Para este legendario director, «todos tenemos la capacidad de recibir informaciones por medio de los sentidos. Yo lo único que hago en mis películas es mover los espacios, no contar historias», explicó.

Forjado en la lucha antifranquista, parlamentario y senador a lo largo de décadas, y con una filmografía militante, Portabella abogó ayer por «la implicación y la solidaridad», así como el hecho de que los movimientos políticos «confluyan para resolver el bloqueo actual y el enroque» de los partidos.

El director del Festival de Sevilla, José Luis Cienfuegos, que presentó el encuentro, señaló que este premio honorífico representa para el certamen «un momento muy feliz, por tratarse de un cineasta fundamental y una figura imprescindible para la democracia en este país». Cienfuegos valoró el hecho de que Portabella siempre haya abierto nuevos caminos a la cultura, «huyendo de los lugares comunes y las industrias acomodaticias, y logrando que el cine sea un foco de reflexión para una ciudadanía más comprometida, rebelde y crítica».

Por otro lado, la proyección de «Madre» marcó el otro gran momento del evento, en una edición en la que el Festival de Sevilla volverá a convertir a la ciudad en la capital del cine europeo y que reunirá a los directores más aclamados de la industria. Nombres como los de Robert Guédiguian, Elia Suleiman, Abel Ferrara, Albert Serra, Joanna Hogg, Pietro Marcello y Mark Cousins, entre muchos otros, se darán cita estos nueve días en el certamen, presentando más de 230 títulos con numerosos estrenos, y protagonizando diversos encuentros y actividades abiertas al público.