Desarticulado un grupo al que la Guardia Civil atribuye un asesinato y que robaba droga

La Guardia Civil ha desarticulado un grupo al que responsabiliza del asesinato de un vendedor de marihuana en Puebla de Cazalla, en Sevilla, en noviembre de 2019 y que se dedicaba a robar droga a otras organizaciones. En la operación "Marpu” han sido detenidas ocho personas, vecinas de Málaga, de las que seis permanecen en prisión, según ha informado este sábado la Guardia Civil.

El crimen ocurrió el 16 de noviembre de 2019, cuando M. G. S. tenía prevista una venta de marihuana que producía él mismo en el interior de una nave de Puebla de Cazalla. Pero los compradores tenían la intención de robar la droga, algo que pensaban que no resultaría complicado ya que se aseguraron de que la víctima estuviera sin compañía. Cuando M. G. S. se percató de la verdadera intención de los compradores hubo un enfrentamiento en el que resultó herido de muerte por arma de fuego.

En la huida, los asaltantes también dispararon contra un familiar de la víctima que no resultó herido. Cuando la Guardia Civil conoció la identidad y los numerosos antecedentes de los asaltantes, se puso en contacto con la Policía Nacional de Málaga para compartir información y dos individuos fueron detenidos en la capital malagueña. Los agentes averiguaron que el grupo criminal estaba compuesto principalmente por tres jóvenes mayores de edad que ejecutaban el “vuelco” de droga, que robaban a otras bandas. Por otro lado, estaban los intermediarios que contactaban con la víctima, se ganaban su confianza y el día del asalto se aseguraban de que estuviera en una situación de vulnerabilidad, solo y en lugar aislado.

Los investigadores barajaban la posibilidad de que A. K. B., el supuesto autor de los disparos que acabaron con la vida de M. G. S, hubiera huido fuera de España, posiblemente a Alemania y lo confirmaron con la policía alemana. También conocieron que el 25 de febrero A. K. B. iba a viajar a Madrid para encontrarse con una ex pareja, por lo que fue seguido y detenido en la localidad madrileña de Torrejón de Ardoz. Con la totalidad del grupo de asaltantes en prisión, la Guardia Civil se centró en las personas que ejercieron labores de apoyo y detuvo en Málaga al resto de la banda.

El Instituto Armado ha dado por finalizada la operación después de detener a un familiar del fallecido y también víctima de una tentativa de homicidio al ser objeto de los disparos de los asaltantes durante la huida, y al que se le imputa un delito contra la salud pública.