Pactos

Moreno cree que el «chantaje» de Vox «le pasará factura»

Los candidatos cierran campaña midiendo posibles pactos. Espadas ya anuncia que seguirá pase lo que pase

Los hipotéticos escenarios postelectorales y las exigencias de los partidos ante posibles pactos marcaron el final de una campaña electoral caracterizada por el bajo tono y la escasa movilización de la izquierda. Fue en el segundo debate televisivo cuando el partido de ultraderecha planteó la entrada en el Gobierno andaluz como condición irrenunciable para un probable apoyo a la investidura del candidato popular, Juanma Moreno. Sobre este aspecto se refirió Moreno, en una entrevista con Efe, rechazando el «chantaje» de Vox que, a su juicio, «le pasará factura» en las urnas.

En este sentido, defendió que si consigue un resultado contundente sobre el resto de partidos lo que habría que hacer es «respetar la voluntad de la mayoría de ciudadanos» y dejar a los populares gobernar en solitario. Moreno, que cerró la campaña con sendos mítines en Sevilla y Málaga, no ve razonable que Vox haya cerrado ya la puerta a una abstención y se sitúe en una posición de máximos con la exigencia de entrar en el Ejecutivo, aunque el PP solo necesitara un escaño, una afirmación hecha por la candidata Macarena Olona «un tanto gratuita y casi irresponsable», que «no habrá gustado a muchos de sus electores». El candidato popular admitió que hay una parte del discurso de Vox que le «incomoda», como es su posición contra el Estado de las autonomías, la lucha contra la violencia de género o contra el cambio climático. «Es muy difícil, cuando uno no cree en una institución, querer gobernar esa institución, eso me incomoda mucho», explicó. El objetivo que se marca es ambicioso, ya que busca acercarse lo máximo posible a los 55 escaños porque, a pesar de que esa mayoría absoluta es «muy improbable», entiende que las posibilidades de presionar y negociar aumentan progresivamente según los diputados que obtenga. «No es lo mismo tener 46 o 47 escaños, que es un excelente resultado, que tener 51. Cuanto más cerca estemos, la capacidad de presión, de negociación y de tener las manos libres va a ser mucho mayor», señaló. Junto a ello, admitió que la baja participación perjudicaría especialmente al PP, porque va «primero» en las encuestas y se dejaría en el camino más votos que nadie, y por ello su equipo de campaña tiene una especial preocupación por la ola de calor y por la posibilidad de que muchos andaluces opten por la playa en lugar de ir a votar.

El candidato socialista, teniendo en cuenta que las encuestas no le sonríen y que las posibilidades de sumar a la izquierda son remotas, defendió que seguirá siendo líder del PSOE-A tras las elecciones «en cualquier hipótesis». Espadas cerró la campaña en Sevilla, arropado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. En una entrevista en TVE, aseguró que afronta los comicios en un «escenario muy complejo y de mucha dificultad». «Las elecciones autonómicas eran el primer objetivo de este nuevo proyecto político. Presentamos la candidatura en enero. Fue cuando terminamos nuestros congresos cuando teníamos los equipos conformados. Hemos tenido muy poco tiempo para poder llegar a todos los rincones de Andalucía para poder explicar este nuevo proyecto y para presentar a los nuevos equipos del PSOE-A, pero este es sólo el comienzo del camino», señaló.

Espadas defendió que la actual dirección del PSOE-A «tiene el respaldo y ha tenido el apoyo unánime de toda la organización y ahora, además, es un partido más unido que nunca» y aseguró que «al día siguiente del 19-J nos pondremos a preparar las elecciones municipales y cuando toquen las elecciones generales». «Soy un corredor de fondo», subrayó augurando un escenario no muy halagüeño para el PSOE.

Por su parte, el candidato de Ciudadanos, Juan Marín, se mostró muy optimista. «Siento deciros que el lunes a las ocho de la mañana seguimos trabajando, si no, si no estamos en el Gobierno, se va a montar un lío de narices», dijo dirigiéndose a los equipos de las consejerías que gestiona el partido naranja. Acompañado por la líder nacional, Inés Arrimadas, en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), defendió que «nunca hubo un Gobierno tan bueno como éste».

La candidata de Por Andalucía, Inmaculada Nieto, aseguró que su formación puede dar una «formidable sorpresa» el domingo y la candidata de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, insistió en su proyecto andalucista. «Nuestros escaños no cotizan en Madrid».