Cultura
Andalucía asume el legado del pintor José Caballero, referente de las vanguardias y miembro de la Generación del 27
La colección, compuesta por casi 150 pinturas y alrededor de 2.500 dibujos, se exhibirá en el museo ubicado en el antiguo edificio del Banco de España de Huelva
Después de años luchando para que la obra del maestro vuelva a la tierra que le vio nacer, José Caballero regresará a Huelva. La Junta ha movido ficha y logra así que el legado del pintor, que permanecía en Madrid, en el piso en el que vivió y murió con junto a su mujer (María Fernanda), regrese a Andalucía.
La consejera de Cultura y Deporte, Patricia del Pozo, acompañada por la alcaldesa de Huelva, Pilar Miranda, ha formalizado este viernes en Madrid con la Fundación Caballero-Thomas de Carranza el traslado de una colección calificada por los expertos de "valiosísima" por su relación con una parte muy importante de la Generación del 27, además de escenógrafo e ilustrador de Federico García Lorca.
La colección, compuesta por casi 150 pinturas y alrededor de 2.500 dibujos, esculturas, figurines y escenografías, biblioteca y hemeroteca, archivo fotográfico y personal, mobiliario y artes aplicadas, se exhibirá en el museo ubicado en el antiguo edificio del Banco de España, pese a que había despertado el interés de otras instituciones como el Reina Sofía. El material incluye dibujos de Lorca y ediciones de su obra ilustradas a mano por el pintor. Entre los fondos, también hay presentes el de otros importantes autores como Pablo Picasso, Federico García Lorca, Rafael Alberti, Daniel Vázquez Díaz, Joan Miró y Alberto Sánchez.
El archivo de Caballero dejará de estar ubicado en Madrid, adonde se traslado en la década de los años 30 del siglo XX para estudiar ingeniería Industrial. Una carrera que tardaría en abandonar dos años para ingresar en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando y continuar con sus clases en el estudio de Daniel Vázquez Díaz, a quien ya había conocido en Huelva, pintando los murales de La Rábida, como recuerda la página web del artista.
A través de su maestro entra en contacto con los creadores e intelectuales más destacados de aquel momento y también a través de él, colabora pintando un telón, en el montaje de 'La Historia del soldado' de Stravinsky, para su estreno en la Residencia de Estudiantes de Madrid.
En 1934, Lorca le incorpora a La Barraca, y es entonces cuando comienza su amistad con Pablo Neruda, Rafael Alberti, Miguel Hernández y los hermanos Luis y Alfonso Buñuel, entre otros. De todos ellos hay constancia en un archivo en el que también se conservan los telegramas que se intercambiaba con el autor de 'Poeta en Nueva York'.
Con la llegada de la Guerra Civil, Caballero es llamado a filas y destinado al frente de Peñarroya (Córdoba). Su condición de dibujante le lleva unos meses a Sevilla y más tarde, a Burgos y a San Sebastián integrado en el servicio de plástica, hasta el final de la contienda.
Con el fin de la contienda y su regreso a Madrid comienza la etapa "más dura y desolada" de su vida. Su tío y padrino Diego Pérez Peral es condenado por su condición de republicano, a doce años y un día de destierro en la isla de Fuerteventura. Son cuatro personas las que tiene que mantener, su madre, sus tíos y su prima. Absolutamente desesperanzado, apenas pinta y se dedica básicamente a realizar los decorados de casi todos los espectáculos folklóricos de aquella década: Concha Piquer, Manolo Caracol, Lola Flores, El Príncipe Gitano, Juanita Reina, etc. También realiza algunas escenografías para cine.
En 1948, fallece su madre y el artista se entrega con más empeño a la pintura. Insistiendo donde lo dejó, en el surrealismo, aunque pronto se da cuenta cuenta de que ese medio de expresión ya no le resultaba válido. El tiempo había pasado y el surrealismo también.