Sucesos

“Gritaba que por Alá no nos moviéramos. ¡Qué horror, han matado al sacristán de la Palma!”

Una testigo en la iglesia de San Isidro del presunto atentado en Algeciras pudo salir corriendo y alertar a la Policía

Algeciras está conmocionada. Inmediatamente, tras el ataque a varias iglesias del municipio, se difundió un audio de una de las testigos. ·”Yo estaba dentro de San Isidro. Cuando venía de comulgar, he visto el ademán que ha hecho, volvía a matarnos”, señala entre lágrimas una testigo.

La afectada señala que el agresor gritaba “que por Alá, por Alá, que no nos moviéramos”. Esta testigo a continuación hace referencia a familiares de la persona a la que originalmente envió el audio y señaló que dijeron “las tres o nos vamos o nos pilla aquí”. “La gente no se ha movido pero nosotras nos hemos ido”, relata. Al mirar para atrás vieron “que volvía con una catana o algo en la mano muy grande” y “oímos los gritos de la gente en la Iglesia”. “Hemos corrido las tres lo que hemos podido y he llamado a la Policía”, señala, entre gritos de dolor: “Qué horror, han matado al sacristán de la Palma”. “Qué horror, dios mío”, concluye la testigo.

En la foto, exteriores de la Parroquia de San Isidro, en la que ha sido apuñalado al sacerdote Antonio Rodríguez, que ha resultado herido de gravedad y está ingresado en el hospital Punta de Europa en estado estable. EFE/A.Carrasco Ragel
En la foto, exteriores de la Parroquia de San Isidro, en la que ha sido apuñalado al sacerdote Antonio Rodríguez, que ha resultado herido de gravedad y está ingresado en el hospital Punta de Europa en estado estable. EFE/A.Carrasco RagelA.Carrasco RagelAgencia EFE

Interior ha asegurado que el atacante de Algeciras no era vigilado por la Policía. Recaía sobre él un expedientes de expulsión, que se estaba tramitando “con todas las garantías”.

El supuesto autor de las agresiones fue detenido en las inmediaciones de la Plaza Alta por la Policía Local todavía con el machete de grandes dimensiones. En San Isidro, entró en la capilla y golpeó algunas imágenes. El párroco intentó expulsar al hombre, que iba con chilaba oscura, y fuera le apuñaló en el cuello. En La Palma, entró gritando al término de la eucaristía y tiró con el machete imágenes y velas, subiéndose al altar mayor, según testigos. El sacristán le echó y en la disputa fue asesinado. El sacristán fue perseguido por el presunto asesino hacia la Plaza Alta ya con una herida en el abdomen, donde fue alcanzado de nuevo por el agresor, que le golpeó en la cabeza con el machete. Otro testigo habría relatado que el agresor también se dirigió a la cercana capilla de Europa y “se lio a machetazos” con la puerta.