Actualidad

Día Mundial contra el Cáncer

Beatriz Martín: «Quise que mi hijo viera las costuras»

El judo la enseñó a competir contra las rivales, pero también a hacer frente a la enfermedad.

Beatriz Martín y Raquel del Castillo. Foto: Gonzalo Pérez
Beatriz Martín y Raquel del Castillo. Foto: Gonzalo Pérezlarazon

El judo la enseñó a competir contra las rivales, pero también a hacer frente a la enfermedad.

Beatriz habla de judo. «Ir a los Juegos de Sydney me marcó. Para clasificarme tuve que subir de peso y enfrentarme a unas mujeres muy grandes y fuertes. Tuve que entrenarme mentalmente para no verlas tan grandes ni tan fuertes». Beatriz habla de judo, pero también del cáncer: «Si combatí contra esas mujeres, podía luchar contra el cáncer. Cada vez que me venía la idea de hundirme, le daba la vuelta». Su estrategia fue ponerle palabras: «Tardé un día completo en encontrarlas para decírselo a mi madre, que había sufrido un cáncer dos años antes. ''Vas a conseguirlo, mucha fuerza, mira cómo lo he conseguido yo”, me respondió». Raquel del Castillo mira a Beatriz con la comprensión de quien ha oído miles de historias del cáncer: «La persona enferma protege a la familia, por esa generosidad para proteger y cuidar a los que tienen alrededor. Este trabajo me ha enseñado la infinita capacidad del ser humano de reponerse, sobreponerse y amar», dice la trabajadora social de la Asociación Española Contra el Cáncer.

«Mi hijo», sigue Beatriz, «lo supo desde el primer minuto. Me paseaba desnuda por casa para que viera las costuras». «Todos vemos a los padres como superhéroes –responde Raquel– y hay que tener cuidado cómo se maneja. Hay que adaptar las palabras y no ocultarlo». La Asociación tiene un teléfono 24 horas (900100036) para ayudar o aconsejar. Beatriz dice que ella tuvo el apoyo familiar y su mentalidad. «Durante un tiempo no fui yo, ahora sí soy yo, otra vez, pero más perfeccionada con más ganas de vivir», cuenta Beatriz sin esconder la emoción.

–«Es que eres campeona olímpica», le dicen.

–«No fui campeona, sólo olímpica. Y con el cáncer he aprendido que es más importante ser campeona en la vida».