Gastronomía

De “Albariños” en CUL DE SAC con la alcaldesa

De “Albariños” en CUL DE SAC con la alcaldesa
De “Albariños” en CUL DE SAC con la alcaldesalarazon

Sencilla, alegre y cercana. Hace unas semanas tuve la ocasión de conocer, en compañía de los vinos y de una buena conversación, el lado más humano de la alcaldesa de Pozuelo, Susana Pérez Quislant.

Quedamos en uno de nuestros restaurantes preferidos de Pozuelo de Alarcón: CUL DE SAC, ubicado en Vía de las Dos Castillas 9B. Llego con algo de retraso, pero la envidiable puntualidad de Susana, hace que me espere mientras cata uno de los vinos más deliciosos, para mi gusto, de la casa, Casal de Arman, compuesto de diferentes uvas blancas (Treixadura, Albariño, Loureiro, Lado y Torrontés); Susana, en cualquier caso, me cuenta que su variedad de uva para los vinos blancos es la Albariño (cuya ficha técnica analizo más adelante).

“No podría decirte el primer recuerdo que tuve, pero en todos ellos están mis tres hermanas”, me cuenta Susana cuando le pregunto por su infancia. Madrileña pura, cuenta que el valor de los valores aprehendidos de su familia son sin duda el trabajo y la lealtad. Dos valores que dedicándose a la política hacen mucha falta. De entre todos los recuerdos que guarda de esos días azules llenos de inocencia propia de los niños destaca una noche en la que su madre le despertó para que su padrino le diera una sorpresa: “abrí una caja y eran unas botas blancas preciosas que había visto días antes. Yo era la tercera de cuatro hermanos y siempre heredaba todo, así que me hacía especial ilusión. Además, sobre mi padrino, que era ciego, nunca entendí cómo había podido comprarme justo aquellas botas que tanto me gustaban”.

Entremedias, optamos por probar otro vino blanco: Casal de Armán 2015, también Ribeiro. Otro coupage, en el que predomina la uva Treixadura al 90% (y sólo un 5% para Albariño y otro 5% para Godello), sin embargo no puedo evitar destacar.

Aunque terminó siendo política, su sueño era ser escritora. De su padre destaca que “era una persona recta”, y de su madre que “era puro amor y ternura”. Empezó a interesarse por el mundo de la política ya de niña; aunque sus comienzos oficiales empezaron en el Ayuntamiento de Madrid.

Estudió derecho, siguiendo el consejo de su padre, y habla del partido del que forma parte como si fuera una extensión de ella misma: “representa más de la mitad de mi vida. El PP es mi segunda familia”.

Cuando Susana se afilia en 1989 al partido era muy diferente todo: “no habíamos gobernado nunca, no teníamos experiencia en la gestión y estaba todo por hacer. Fueron unos años muy bonitos e ilusionantes”, analiza con mucho cariño.

“Ser alcaldesa es lo más bonito que me ha pasado en toda mi vida profesional” afirma con certeza y orgullo, mientras degustamos las ricas alcachofas de Cul de Sac, aun en temporada.

Su día a día es muy intenso. Su trabajo no entiende de horarios, pero intenta pasar todo el tiempo que puede con su familia.

“Creo que lo principal es estar a los problemas reales de los vecinos y, para eso, la cercanía es fundamental. Esa es la seña de identidad de mi Gobierno”, resume la razón de su éxito. “Por supuesto que, además, están los grandes proyectos, nuestro plan de inversiones hasta el fin de la Legislatura y los programas especialmente dedicados a las familias, que sin duda son nuestra prioridad”; añade. “Pozuelo es una ciudad familiar y nosotros tenemos que cuidar a esas familias, a todas ellas”, insiste Susana.

Susana se define como una persona muy feliz dentro de lo razonable, y define este estado como el “conseguir estar bien con uno mismo y poder despertar cada mañana”. Cree en el destino y en el fenómeno de que “la vida siempre pone las cosas en su lugar”.

Asegura que le falta mucho por hacerte, aunque, en palabras de la misma “tengo cuerda para rato”. Y su lema de vida es “a veces se gana; a veces se pierde; pero siempre se aprende”.

En lenguaje de emociones, como es costumbre, y en consonancia con mi protagonista, sobre el primer vino (Emilio Rojo) diría que es un vino “coqueto, cariñoso y estimulante”, y sobre el segundo (Casal de Armán) lo definiría como un vino “elegante, sobrio y tranquilo”. Si la alcaldesa fuera uno de estos vinos, diría que es el segundo: por su saber estar, su clase y su estilo tan definido a la par que cercano.

Un libro...”La sombra del viento” de Carlos Ruiz Zafón

Una película...Las amistades peligrosas

¿Musica? Me quedo con Joaquín Sabina y Freddie Mercury

CARTA

Anchoas San Filippo Edición Limitada con Pan de cristal

Ensaladilla Rusa Trufada

Chips de Alcachofas con muselina de alioli

Besugo

LA VARIEDAD DE UVA ALBARIÑO, LA PREFERIDA DE LA ALCALDESA

En los vinos blanco ocurre un fenómeno curioso: prevalece la variedad de uva por encima de la D.O. Mientras que con los tintos elegimos en restaurantes pidiendo por un “Ribera” o un “Rioja”, en los blancos la tendencia es a pedir un “verdejo” o un “albariño”. Pero la Albariño no es una Denominación de Origen sino una variedad de uva blanca originaria de la zona de Galicia, también típica del norte de Portugal llamada ‘alvarinho’ o ‘cainho blanco’.

Los vinos elaborados a partir de esta uva se caracterizan por tener una muy alta graduación alcohólica. Son vinos ácidos y en nariz dejan un toque afrutado y floral. Y con una longevidad algo escasa, si comparamos esta uva con la Godello, por ejemplo. Se recomienda consumir sus vinos jóvenes.

Esta uva es una de las variedades blancas más conocidas de España. Se utiliza en la D.O. Ribeiro, Valdeorras y Rias Baixas.

SOBRE ‘CUL DE SAC’...

No puedo no hacer una mención especial al restaurante. Nunca falla la cocina ni el servicio. Además de una interesante decoración a caballo entre el estilo minimalista y el rural (hay una parrilla en una parte del restaurante que simula la forma de un chimenea antigua, en donde además puedes ir controlando cómo se va haciendo tu plato...), CUL DE SAC goza de una envidiable bodega de vinos, en la que la Alcaldesa y yo aprovechamos y nos hicimos fotos.