Las Cenas a Ciegas de Toledo y una Estrella Michelín

Ya conocía Toledo de otras ocasiones, de haber hecho turismo, pero hasta el momento nunca me dejé seducir por su gastronomía como en esta ocasión, en la que un grupo de críticos gastronómicos pasamos un maravilloso fin de semana en el que pudimos conocer las famosas ‘cenas a ciegas’ o el famosísimo restaurante con Estrella Michelín llamado Carmen de Montesión del Grupo ‘El Bohío’.

Sin duda alguna esa estrella se la merece. Y es que el chef, Iván Cerdeño, es un auténtico artista que es capaz de emocionar a cualquiera con esa pluma ibérica de bellota a la brasa que sirven acompañada de yuca, entre otras guarniciones. De hecho, de entrante degustamos arenque aliñado, pepino, yogurt y albahaca; después probamos buñuelos de queso, croquetas artesanas de jamón, bombón de perdiz y atascaburras. Pasamos a probar una porrusalda antes del salmón asado con miso rojo y encurtidos, y finalmente la pluma mencionada.

¿El vino? Un Méntrida: Arrayán Premium 2009 compuesto de las variedades Cabernet Sauvignon, Syrah, Merlot y Petit Verdot. Una auténtica joya de las tierras de La Mancha que, en lenguaje de emociones, definiría como un vino fuerte, con personalidad y de pura cepa.

Me gustaría destacar el aceite que sirven en el Carmen de Montesión, Casas de Hualdo de la variedad Cornicabra de olivares de Castilla La Mancha, situados a 500 metros de altitud. Todo un aceite de oliva virgen extra de categoría superior.

Por otro lado, las Cenas a Ciegas tienen como objetivo revelar el menú pero no el sitio, siendo éste algún lugar emblemático de la ciudad. Es el Hotel Beatriz el encargado de gestionar estas cenas.

De hecho, yo no sabía a dónde íbamos a cenar, dado que solamente averiguas el sitio después de recorrer la ciudad con una guía turista.

Soy una afortunada de poder contar que cené en la iglesia de San Pedro Mártir, disfrutando de una cena ofrecida por el Hotel Beatriz que consistía en la degustación de una ensalada de perdiz de campo y perlas de tomate, una delicia de queso de cabra con mermelada de calabaza, un salpicón de marisco, otra ensalada de láminas de bacalao con rollitos de atún ahumado, huevas de salmón y medallones de gambitas con aceite de cebollino. Para acabar: lomo de merluza rústica con crema de cebolla caramelizada y salsa bilbaína. Y de postre, lágrima de mousse de biscuit al chocolate y salsa de frambuesas.

Esta experiencia gastro-patrimonial es digna de todas las alabanzas que está recibiendo Toledo como capital de gastronomía de 2016, que, aunque se vaya acabando el año, estoy segura de que seguirán realizando este tipo de actividades en los próximos años.

Por otro lado, no puedo pasar por alto las maravillosas pastas artesanales que nos ofrecieron las Hermanas del Convento de Santa Isabel de los Reyes, un convento precioso, por cierto. O la Ruta de la Tapa, empezando por el restaurante El Botero en donde probamos las croquetas de rabo de toro y carbón de bacalao.

La siguiente parada fue en los Alfileritos 24, en donde degustamos un carpaccio de ciervo con setas encurtidas, nube de parmesano y fruta de la pasión y Cochifrito deshuesado con migas manchegas dulces.

Después le tocó el turno a Adolfo en el que descubrimos el bombón de jamón y queso y pan de lágrimas con anchoa y azafrán; también en Locum disfrutamos de su famosa tapa, galleta Oreo de Foie y taquitos de atún; en Palencia de Lara rendimos un homenaje al cochinillo y tartar de atún con guacamole. Y finalmente, cuando ya creíamos no poder comer más, no pudimos rechazar el bacalao con mayonesa de ajo blanco, migas y huevo poché en el Nuevo Almacén.

Un viaje difícil de olvidar, lleno de anécdotas, estilo y raíces.

La ruta de la tapa en noviembre

Y es que 66 establecimientos hosteleros se suman a las XVII Jornadas de la Tapa que se van a celebrar en Toledo del 10 al 27 de noviembre

De inspiración cervantina y dedicadas a la caza y al aceite D.O. Montes de Toledo, estas son las bases culinarias con las que se presentan las 66 propuestas gastronómicas que se podrán degustar dentro de las XVII Jornadas de la Tapa de Toledo, que organiza la Asociación Provincial de Hostelería en colaboración con el Ayuntamiento, junto a la tercera edición de “Cócteles por Toledo”.