Activan el nivel 1 de alerta de inundaciones en Valladolid por la crecida del Pisuerga y Valderaduey

El delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Valladolid, Augusto Cobos, declaró el Plan de Inundaciones de Castilla y León en su nivel 1, en la provincia, ante la previsión de avenidas de los ríos Pisuerga y Valderaduey a su paso por esta tierra, y aante la previsión de la continuidad de lluvias y rachas de viento.

Si bien hasta la fecha no se han producido incidencias destacables en cuanto a inundaciones, sí debe señalarse el goteo continuo de incidentes, tales como balsas de agua en carreteras que dificultan la conducción o inundaciones puntuales en infraestructuras próximas a los cauces de los ríos.

También se está haciendo seguimiento de las incidencias relacionadas con las fuertes rachas de viento, que llegan acompañadas de lluvia y que han originado numerosos incidentes relacionados con obstáculos y árboles en las vías de comunicación, originando cortes puntuales de carreteras.

Debido a los daños ocasionados por las rachas máximas de viento acompañadas de agua, el hecho más destacado han sido los cortes de suministro eléctrico de manera intermitente en varias localidades, incidentes que fueron resueltos por las empresas distribuidoras a la largo de la tarde y durante la noche. Entre las infraestructuras de mayor vulnerabilidad afectadas destacan las residencias de personas mayores de Campaspero y Peñafiel, a las que se reestableció el suministro de manera inmediata.

Desde el inicio de este episodio de lluvias, que ha tenido especial incidencia en la población, se está trabajado de forma coordinada entre todas las administraciones: Diputación de Valladolid, Subdelegación del Gobierno (Guardia Civil y Confederación Hidrográfica del Duero) y alcaldes de los principales municipios afectados, teniendo que destacar la especial implicación de todos ellos.

El alcalde de Valladolid, Óscar Puente; y la presidenta de la CHD, Cristina Danés, quisieron conocer de primera mano la crecida y se trasladaron hasta las inmediaciones de la zona de Las Moreras. Allí Danés advirtió de un pico de crecida del Pisuerga en Valladolid esta tarde que llegará mañana al Duero a su paso por Toro. En estos momentos, Cabezón de Pisuerga contabiliza 1.400 metros cúbicos por segundo, que llegarán a la ciudad sobre las 17 horas, y que se convertirán en 1.250-1.300 metros cúbicos por segundo.

A juicio de Danés, y según los modelos del organismo de cuenta, este caudal se mantendrá estable durante cinco horas, para empezar a descender después progresivamente. La CHD informará en próximas horas de una actualización que aclarará la situación del Pisuerga en las próximas 48 horas, dado que estaba prevista una avenida mayor el día de Nochebuena que finalmente no será tal.

Por su parte, Puente agradeció la cooperación del organismo de cuenca y destacó que los modelos que ha desarrollado la CHD “se están cumpliendo”. “Se nos avisó de una crecida de estas características para esta tarde y así es”, comentó el regidor, quien hizo un llamamiento a la ciudadanía “a la calma y cooperación, ya que se han juntado las lluvias, la riada y el fuerte viento”. “Estamos redoblando esfuerzos”, deslizó Puente, quien agradeció el trabajo efectuado a los servicios de policía y protección civil para que la ciudad “sufra las menores consecuencias posibles de estas inclemencias”.

Por último, el concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, José Antonio Otero, señaló que tanto los diferentes cuerpos de policía, como Bomberos, Protección Civil y sus voluntarios trabajan desde anoche “intensamente” en restablecer la ciudad a su normalidad, “cuestión muy difícil porque esto no para, ya que el viento provoca el desprendimiento de ramas de los árboles”.

De hecho, de las 79 intervenciones de los Bomberos registradas desde ayer, prácticamente todas eran por ramas. También muchos contenedores volcados, con el consiguiente riesgo para vehículos y peatones. “Esperemos seguir con la situación controlada”, explicó.

También apeló a la responsabilidad de los ciudadanos para que “se ocupen un poco de sus cosas” y aseguren objetos como tiestos y macetas en ventanas y terrazas, porque el viento puede ocasionar “un disgusto”. Para acabar, recomendó “andar con cuidado por la calle por la presencia de las hojas mojadas”.