Castilla y León no bajará la guardia el próximo curso

Dice el sabio refranero popular que lo que funciona, mejor no tocarlo o modificarlo justo y necesario. Pues esto es lo que pretende llevar a cabo la Consejería de Educación de cara al próximo curso escolar que arrancaraá el 10 de septiembre en Castilla y León y en el que se «repetirá» el modelo de educación presencial y máxima seguridad que tan buenos resultados ha dado en el actual, que será también flexible en función de la situación epidemiológica de cada momento.

De hecho, Castilla y León es la única región de la España autonómica que ha conseguido mantener la presencialidad de los alumnos en las aulas en todos los niveles de enseñanza. Y eso a pesar de momentos complicados como en enero, donde llegó a haber hasta cuatrocientas aulas cerradas por la covid, un dos por ciento del total.

«Un éxito colectivo detrás del cual se encuentra la profesionalidad de los equipos directivos, y a implicación y responsabilidad de los profesores, personal auxiliar y de los alumnos y sus familias», destacaba la consejera de Educación, Rocío Lucas, al presentar el protocolo de organización y prevención en los centros educativos de la Comunidad que, entre otras cuestiones, contempla el mantenimiento de los grupos estables de convivencia, los denominados burbuja, para los dos ciclos de Infantil y el primer curso de Primaria. Aulas que contarán con un máximo de 22 escolares que podrían llegar a 25 en un estado de normalidad en el que se permitiría incluso la interacción entre grupos burbuja.

En el resto de niveles educativos los alumnos tendrán que usar mascarilla y mantener una distancia de metro y medio entre pupitre, mientras que no se podrán sobrepasar los 25 alumnos para Primaria, treinta en Secundaria y 35 en el Bachillerato.

Igualmente, se mantendrá el número de clases desdobladas con los 1.300 profesores de apoyo que se contrataron para este curso que seguirán al pie del cañón, al igual que los equipos covid que tan buen rendimiento han dado.

Y, entre las novedades, volverá el deporte individual y colectivo que no implique contacto físico con un máximo de treinta alumnos haciendo deporte a la vez en actividades de equipo, mientras que las clases extraescolares se generalizarán desde el inicio del curso escolar.

«Cabe la posibilidad de que pequemos por exceso, pero es que no debemos bajar la guardia y debemos incidir en la prevención para garantizar la seguridad», destacaba la consejera.

Asimismo, se limitará al máximo la presencia en los colegios de personas ajenas a los centros y se mantendrá la entrada y salida escalonada y se minimizará el cruce en pasillos entre el alumnado, además de que se seguirá priorizando la atención no presencial a los padres. Los centros, además, deberán mantener las medidas de prevención e higiene así como los controles de temperatura a la hora de acceder al colegio y se intensificará la limpieza. También que se mantendrán los planes de refuerzo y recuperación actuales, así como los de contingencia por sus buenos resultados.

Por otro lado, Lucas mostraba su malestar por que el Gobierno haya aprobado un anteproyecto de Ley de Formación Profesional en el que prevé, entre otras cosas, permitir que los estudiantes cursen materias optativas en la Universidad o que la mitad de la formación sea haga en empresas, sin contar con las Comunidades.