Sociedad

12 Años sin cementerio en el pueblo... y 3 meses sin muertos que lo estrenen

Esta circunstancia se da en la localidad zamorana de Vecilla de la Polvorosa

Cementerio de Vecilla de la Polvorosa, en Zamora
Cementerio de Vecilla de la Polvorosa, en ZamoraLa razónLa Razón

Nada menos que doce años estuvieron los habitantes de Vecilla de la Polvorosa (Zamora) sin poder practicar enterramientos en el pueblo por falta de camposanto y aunque desde hace tres meses disponen de un nuevo cementerio estos días está sin flores porque aún no hay muertos, informa Efe.

Por el momento, los vecinos se han tomado al pie de la letra la petición que, haciendo gala de humor negro, les hizo el alcalde pedáneo de la localidad, César Mayo, al exhortarles en la inauguración del nuevo cementerio a que esperaran al menos otros doce años para estrenarlo.

Entre los 88 habitantes, como en la mayor parte del medio rural, abundan personas mayores y hay incluso cuatro nonagenarios, pero como ha recordado Mayo a Efe “nunca se sabe quien va a morir antes” y hay que intentar retrasar al máximo el estreno.

Que la gente no lo utilice, que no se muera, eso desde luego”, ha pedido. El responsable local de esta pedanía zamorana ha calculado en al menos veinte los fallecidos que no han podido ser enterrados en los últimos doce años por falta de espacio en el antiguo cementerio, cifra que puede ser aún mayor si se suman los hijos del pueblo que, aunque ya no vivían en él, pretendían que les enterraran en Vecilla de la Polvorosa junto a sus seres queridos.

Otro de los vecinos, Laurentino Peñín, que ha acudido al antiguo camposanto a honrar a sus familiares fallecidos, ha explicado que los años sin espacio para nuevas tumbas algunos han optado por la incineración y otros por dar sepultura a sus familiares en otros pueblos, la mayoría en Benavente, la capital de la comarca.

La historia de falta de lugar de enterramientos arranca en 2009, cuando el cementerio que existía de toda la vida, que se ubicaba en pleno casco urbano, junto a la iglesia, se quedó sin espacio. La primera opción fue construir nuevos nichos, pero encontró el rechazo de los vecinos que vivían frente a ellos, al otro lado de la calle, y como la ampliación no contaba con los permisos necesarios hubo que demolerlos. Luego llegaron los problemas de posibles inundaciones de la nueva ubicación elegida para el camposanto, los permisos de la CHD, Sanidad, Fomento y otros organismos públicos, por lo que, entre unas cosas y otras, las obras no han concluido hasta pasadas las olas más letales de la pandemia de la Covid-19.

La alcaldesa de Morales del Rey, Consuelo Posado, a cuyo ayuntamiento pertenece Vecilla de la Polvorosa, ha admitido que cuando hace dos años accedió a la alcaldía hacer el cementerio fue su “interés más grande” y ha presumido de lo bonito que ha quedado, con los nichos a los lados y un jardín zen en medio con piedras blancas, dos estatuas de ángeles y un olivo.

Ha rememorado cómo el pasado mes de julio, en la inauguración del camposanto, se le acercó un vecino de 94 años y, entre lágrimas, le confesó que ya podía morirse tranquilo porque sabía dónde iba a ir, le dijo señalando el columbario.Aún así, los 42 nichos construidos permanecen este puente de Todos los Santos sin abrir, sin placas ni decoración floral que indique que hay vida de ultratumba en su interior.