Sociedad

Vecilla de la Polvorosa ya puede enterrar a sus muertos en el cementerio

Tras doce años sin poder hacerlo, los vecinos de esta localidad zamorana hacen gala de buen humor negro y esperan retrasar al máximo su estreno

Cementerio de Vecilla de la Polvorosa, en Zamora
Cementerio de Vecilla de la Polvorosa, en ZamoraLa razónLa Razón

Los vecinos de la pequeña localidad zamorana de Vecilla de la Polvorosa, una pedanía de apenas noventa habitantes perteneciente al Ayuntamiento de Morales del Rey, ya pueden enterrar a sus familiares muertos en el cementerio del municipio.

Algo que no han podido hacer en los últimos doce años y han tenido que acudir a otros camposantos cercanos cuando ha habido algún fallecimiento, debido a que el proyecto del nuevo camposanto ha estado paralizado por problemas de inundaciones sin resolver.

Esta semana se inauguraba el nuevo cementerio del municipio con la presencia del presidente de la Diputación de Zamora, Francisco José Requejo, quien pedía perdón a los vecinos de esta pedanía por todo este tiempo sin que se resolviera este problema en el camposanto. “Por fin se ha hecho justicia con la localidad y sus habitantes”, destacaba en su intervención.

Pese a todo, los vecinos de este municipio se lo han tomado bien y hacen gala de su humor negro con este asunto. Lo hacía el propio alcalde pedáneo durante la inauguración del nuevo camposanto cuando pedía a sus vecinos que no se mueran y no estrenen todavía el cementerio, al menos hasta dentro de otros doce años, que es el mismo tiempo que han estado sin él.

Pero bromas aparte, para este primer edil es una satisfacción y una “enorme dignidad” poder contar con el cementerio por lo que supone a las familias poder enterrar a sus seres queridos en el lugar donde nacieron.

De la misma forma, la alcaldesa de Morales del Rey, Consuelo Posado, también destacaba el orgullo del pueblo tras tantos años sin cementerio y, al igual que el alcalde pedáneo, invitaba a los vecinos a retrasar al máximo el estreno del camposanto. Finalmente, el vicepresidente primero de la Corporación provincial zamorana, José María Barrios, por su parte, hacía hincapié en el ejemplo que supone la inversión llevada a cabo así como en el por qué el dinero de la Administración en ocasiones no puede distribuirse únicamente con criterios de población, ya que de ser así no habría suficiente para hacer la necrópolis.