Vivienda
Mañueco: "Castilla y León se lo pone fácil a quien precisa de un hogar"
Más de 21.000 familias percibirán la ayuda al alquiler durante el mes de julio
Buenas noticias para quienes estén buscando una vivienda en alquiler, sobre todo jóvenes que estén pensando en emanciparse o para familias con menos recursos.
Y es que este lunes el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha anunciado que más de 21.000 familias percibirán la ayuda al alquiler durante el mes de julio, es decir, un 14 por ciento más que la convocatoria anterior, lo que se traduce en 2.550 por encima.
Además, seis de cada diez se han concedido a mujeres (12.694) y cerca del 30 por ciento, jóvenes menores de 36 años (6.280). De estos, dos de cada tres son mujeres menores de 36 años.
“Es un nuevo hito para la política de vivienda de la Junta, que es de un marcado carácter social, dirigida a satisfacer el derecho de los habitantes de Castilla y León a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Es el objetivo de esta política eficaz”, destacaba el presidente durante un acto en el que dio a conocer la resolución de las ayudas al alquiler, y que mañana saldrá publicada en el Bocyl.
Mañueco aseguraba que será en ese momento cuando se informe a todos los beneficiarios mediante un sms de que la ayuda se les ha concedido y que se les ingresará la cantidad correspondiente directamente en sus cuentas bancarias.
“Queremos promover la emancipación de los jóvenes, facilitar la vida a las familias, proteger a los mayores, dar seguridad al mercado inmobiliario y fijar población en el territorio”, apuntaba el jefe del Ejecutivo, mientras destacaba que este acuerdo forma parte de una política desarrollada en el marco del Diálogo Social y aseguraba que estas ayudas “baten un nuevo récord” por el aumento de solicitudes y al número de expedientes favorables, que se han subido.
“Las ayudas al alquiler son un compromiso cumplido”, insistía el presidente, para quien un año más se mantiene el incremento del porcentaje de subvención en 10 puntos porcentuales pasando de 40 al 50 por ciento de la renta, porcentaje que aumenta hasta el 60 para los jóvenes menores de 36 años y hasta el 75 por ciento si la vivienda o habitación de ese joven se sitúa en el medio rural. Este mismo porcentaje, del 75 por ciento, se mantiene para familias vulnerables sobrevenidas.
“En Castilla y León, a quien precisa un hogar se lo ponemos más fácil: menos burocracia, menos preocupación y más independencia”, finalizaba Mañueco
Este año se han destinado para esta línea 49 millones de euros, 29 más que en el presupuesto inicialmente previsto, y 8,5 más que en 2024.
La convocatoria, cuyo importe medio asciende a 2.331 euros, un 5,81 por ciento más que la anterior, se ha resuelto en cinco meses y medio, medio mes antes de que expirara el plazo establecido en la Orden de convocatoria.
Al respecto, con este montante, defendió que “un año más, desde que soy presidente, todos los que cumplen los requisitos recibirán la ayuda, sin que nadie con derecho se queden sin ella”. Esas condiciones son residir legalmente en España, tener un contrato de arrendamiento en una localidad de Castilla y León, estar empadronado en el municipio y tener ingresos en los umbrales mínimos y máximos fijados en la convocatoria.
Por su parte, se incrementaron para algunos colectivos los ingresos de las unidades de convivencia que pueden solicitar las subvenciones pasando de 3 hasta 5 veces el IPREM. Además, se han elevado las cuantías de las rentas de alquiler máximas mensuales, antes 375 euros y 500 euros, y ahora entre 450 y 550 euros para la vivienda (la cifra más baja corresponde al medio rural y la alta a Burgos, León, Salamanca, Segovia y Valladolid). Igualmente, se consolida el alquiler de habitaciones como objeto de la subvención, manteniéndose el importe máximo de no superar los 150 euros si acontece en un municipio del medio rural y los 200 euros en el resto de los municipios.
La convocatoria ha recibido 31.362 solicitudes, un 14,93 por ciento más que el año anterior, con un incremento en todas las provincias. El importe destinado a jóvenes asciende a 17,2 millones (el 35,24 por ciento del total). Por otro lado, 2.111 beneficiarios tienen más de 65 años, de los cuales 1.328 son mujeres dentro de esta franja de edad. Así, el importe destinado a mayores asciende a 4,3 millones (el 8,92 por ciento).
Por su parte, el 98,1 por ciento de los beneficiarios tiene ingresos inferiores a 3 veces el IPREM (25.200 euros), el 76,66 por ciento tiene ingresos inferiores a 2 veces el IPREM (16.800 euros) y el 44,03 no alcanza una vez el IPREM (8.400 euros). Además, 2.260 son familias numerosas, y de ellas, 1.555 son categoría general y un total de 705 de categoría especial.
Respecto a las unidades de convivencia con discapacidad, se han beneficiado es esta resolución 4.003 unidades de convivencia con alguna persona con discapacidad. Cabe señalar, por otro lado, que 185 beneficiarios corresponden al colectivo de personas que han perdido el derecho a usar la vivienda por sentencia de separación, divorcio o nulidad. Y hay cuatro beneficiarios que están incluidos en el apartado de víctimas de terrorismo.
De los 21.006 beneficiarios, 146 corresponden a alquileres de habitaciones y 20.860 a viviendas. Además, el 22,4 por ciento del total de beneficiarios procede de municipios rurales de ámbito 3 (los de renta como máximo de 450 euros), y de estos, un 30,29 por ciento son jóvenes.
Por provincias, el mayor número de beneficiarios se encuentra en Valladolid, con 4.853 y 12,2 millones de euros de ayuda, lo que supone el 23,1 por ciento del total. Les sigue León, con 4.220 y algo más de nueve millones (20,09 por ciento); Salamanca, con 3.305 y 8,1 millones (15,7 por ciento); y Burgos, con 2.545 ayudas y 6,1 millones (12, por ciento). A continuación se encuentran Ávila, con 1.448 beneficiarios y 2,9 millones (6,9 por ciento), Palencia, con 1.375 y 3,1 millones (6,55 por ciento), Segovia, con 1.328 y tres millones (6,3 por ciento) y Zamora, con 1.311 y 2,8 millones (6,2 por ciento). Cierra el listado Soria, con 621 beneficiarios y 1,38 millones, casi el tres por ciento del total.
“Potente política”
“Todo forma parte de una potente política de vivienda, útil, eficaz, seria y responsable”, abundó Mañueco, quien defendió que su Ejecutivo “mejora las ayudas al alquiler”, aumenta el parque público de alquiler, con 3.100 viviendas alquiladas por la Junta en la actualidad; y construye más vivienda pública “de calidad, eficientes, modernas y con un precio asequible”. En este sentido, recordó que actualmente hay 1.350 viviendas públicas en construcción en distintas fases, tanto para venta como alquiler, además de otra serie de inmuebles municipales o eclesiales en desuso, que “buscan alquiler joven en el medio rural”.
El balance total de ayudas concedidas en el periodo 2015.2024 es de 131.096 familias beneficiadas, que han recibido 237.404.563 euros.
Ayuda a vivienda libre
Por otro lado, también apuntó que el Gobierno autonómico ayuda a comprar vivienda libre, con un descuento del 20 por ciento del precio y aval ante los bancos. En este punto, dijo que 1.200 familias jóvenes se han beneficiado de estos avales de la Junta
Mañueco mencionó, igualmente, los beneficios fiscales que ofrece el Ejecutivo “para compra, alquiler y rehabilitación, especialmente a jóvenes y en el medio rural”.
“En resumen, una política que tiene el objetivo de que nadie que quiera vivir en esta tierra deje de hacerlo por falta de vivienda”, anotó el presidente, quien observó un “evidente contraste” con otras administraciones públicas. “Las políticas no pueden ser nunca humo, y menos en vivienda”, concretó.
Al respecto, ensalzó la labor del Gobierno regional, que hace el “máximo esfuerzo para funcionar, gestionar con eficacia e incrementar derechos, con el objetivo de generar más oportunidades, más empleo y las posibilidades de acceder a una vivienda para desarrollar un proyecto individual y de alta calidad de vida”.
Gran aceptación
Con anterioridad a la intervención de Mañueco, cuatro jóvenes de la Comunidad expusieron sus casos en torno a estas ayudas. Es el caso de Lucía Carretero, trabajadora en la Junta, que adquirió una vivienda libre en Tudela de Duero (Valladolid) con el aval de la Junta. “La cuota de entrada que pedía el banco disminuyó un 20 por ciento”, defendió, con lo que tuvo que hacer frente a únicamente 4.000 euros de la entrada, alejada de lo que la entidad solicitaba inicialmente para suscribir la hipoteca. “Una inmobiliaria nos facilitó todo. Fue un mecanismo muy sencillo: en la web de la Junta introduces unos datos y Somacyl te hace un aval, con el que el banco ya solo te hace pagar el 20 por ciento”, afirmó.
En la misma línea, Sergio, con 29 años, y en Valladolid, recuerda que le solicitaron una entrada muy alta y contactó con una financiera que realizó una investigación para analizar qué bancos tenían las mejores condiciones y con la ayuda de la Junta. “Y en menos de un mes conseguimos la aceptación. En el mejor de los casos teníamos que adelantar 20.000 euros y la ayuda nos facilitó la mitad”, precisó Sergio, quien admitió que desconocía la existencia de esta línea y se enteró por un amigo. “Sin esta ayuda, mi pareja y yo no hubiéramos podido tener la casa”, agradeció.
En tercer lugar, Paula, quien accedió a una vivienda de promoción pública en Tudela de Duero. Profesora en el Colegio Lourdes de Valladolid, explicó que solicitó la ayuda y sobre el papel les comunicaron la casa que les tocaba. Sobre el precio ejecutaron una reducción del 20 por ciento, con un coste cerrado de 100.000 euros, “ayuda de la Junta ya incluida”.
Por último, Ángela Esteban habló de su característica situación, adaptada a una de las líneas de ayudas al Tercer Sector, dado que la Junta también financia viviendas para organizaciones como Cruz Roja, Cáritas, Fundación Intras, Fundación Personas o Impulsa Igualdad, que fue la que ayudó a esta vallisoletana. Son las que deciden a quien adjudican estas viviendas con una circunstancia determinada. Ángela tiene 19 años y cuenta con una discapacidad visual. “Vine a Valladolid a estudiar y necesitaba un piso con unas características determinadas. Me comentaron este proyecto y mi asistente me dio el empujón definitivo”, comentó. En su vivienda, donde reside sola, el asistente la ayuda a realizar la compra, limpiar o acercarme a pie al instituto cuando lo necesita.