El Servicio Público de Empleo de Castilla y León se refuerza con 150 puestos de trabajo

Cambios en el Servicio Público de Empleo de Castilla y León (Ecyl). Una nueva estructura de organización que suprimirá la figura del gerente y que asumirá los programas de orientación realizados hasta la fecha con subvenciones a los sindicatos y que supondrá un refuerzo de 150 personas más a la actual plantilla.

Así lo ha explicado el consejero de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones en una Comisión celebrada en las Cortes regionales y donde ha argumentado que el objetivo es mejorar el sistema de orientación debido a que su gestión por parte de los sindicatos "no ha sido eficiente ni eficaz", y ha explicado que el ratio de empleabilidad de estos programas, según un estudio de evaluación elaborado por el SEPE, es baja.

Desde el PSOE, Alicia Palomo ha recriminado al consejero "su cruzada ideológica contra los sindicatos", a lo que el propio Veganzones ha rebatido que el PSOE, cuando se encuentra en el Gobierno crea multitud de entidades y sociedades con el fin de "colocar a estómagos agradecidos".

El consejero explicó que el Ecyl va a tener una dimensión administrativa racionalizada y acorde con los cambios estatales en la prestación de la formación y las políticas activas de empleo. De esta manera se unificará en la Secretaria General de Coordinación las figuras de viceconsejería, vicepresidencia y gerencia del Ecyl y la Dirección General de Economía Social y Autónomos pasará a depender del Ecyl.

“Se apuesta por un servicio público de calidad”, sostuvo, tras indicar la próxima contratación de 54 técnicos para los programas de orientación y formación, en especial en las oficinas del medio rural, a la vez que manifestó que no habrá cambios en las gerencias provinciales.

Por su parte, los dos parlamentarios socialistas le acusaron de romper los consensos, de realizar una “gestión errática” y de “destrozar todo lo que toca”. Palomo y González defendieron la gestión de las entidades colaboradoras en los programas vinculados al empleo y desempleados y la primera sentenció que “el único estómago agradecido” es el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, sin competencias.