¿Atrapados en Barcelona hasta julio?

Los trabajadores de Barcelona pueden salir de la ciudad para ir a Sabadell, Esplugues de Llobregat o Mataró, pero tal y como se han diseñado las regiones sanitarias para avanzar en la desescalada, los 1.636.792 vecinos de Barcelona no pueden salir de los 101,35 kilómetros cuadrados que tiene la ciudad para ir a ver a un familiar o trasladarse a una segunda residencia hasta que no llegue la fase 3.

La Generalitat convenció al Ministerio de Sanidad para que se tuviera en cuenta la región sanitaria y no la provincia como unidad para gestionar el desconfinamiento. Y ahora que en la fase 1, los ciudadanos tendrán libertad para moverse a lo largo y ancho de su provincia, los barceloneses están atrapados en su ciudad. El mapa que propuso Salud está dibujado en base a las siete regiones en las que se organiza la sanidad catalana para distribuir los centros de atención primaria y los hospitales de referencia: Camp de Tarragona, Terres de l’Ebre, Catalunya Central, Girona, Alt Pirineu i Aran, Lleida, y Barcelona. Pero como novedad, en Barcelona, tuvo en cuenta la concentración de población y la incidencia de la Covid-19 y la subdividió en tres zonas: Metropolità Nord, Metropolità Sud y Barcelona ciudad.

La insistencia de la Generalitat para que en Cataluña se tuviera en cuenta la región sanitaria y no la provincia como unidad para determinar qué zonas pasaban de fase y su aceptación por parte del Gobierno, tiene desventajas respecto a Madrid, en cuanto a la movilidad se refiere. Será muy distinto avanzar a la fase 1 para los habitantes del área metropolitana de Barcelona y los de Madrid, aunque ambas lograran ayer avanzar en la desescalada.

Sin embargo, la consellera de Salud, Alba Vergés, abrió las puertas a reconsiderar la posibilidad de reunificar las regiones sanitarias de Barcelona, Metropolitna Norte y Metropolitana Sur, para que los ciudadanos de estas tres áreas tengan más espacio para moverse. Esto facilitaría a los vecinos de Barcelona, por ejemplo, hacer deporte por la montaña de Collserola o ir a visitar a familiares que viven en el extrarradio. Pero, finalmente, la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona decidieron ayer en una reunión que las áreas sanitarias se quedan igual. Ada Colau es una férrea defensora de unificar las tres areas metropolitanas. Quim Torra, no. La decisión de la Generalitat ha abierto debates en las redes.

Por el momento, el movimiento entre áreas, que como Barcelona, L’Hospitalet de Llobregat o Sant Cugat del Vallès pueden estar separada por una calle o una trialera, seguirá permitiéndose por por razones laborales, médicas, o para asistir a un familiar enfermo.

Si no se cambian estos parámetros, los barceloneses podrán salir de la ciudad hasta la fase 3, que será cuando se levantará en toda España la prohibición para los viajes más allá de la provincia, y en su caso de la región sanitaria. Y para esto aún queda tiempo. Será casi al final de la desescalada, cuando el país viva ya en la “nueva normalidad”.