Macabro hallazgo

Los perros se comieron parte del cuerpo del hombre hallado sin genitales en Barcelona

La investigación de los Mossos apunta a una muerte accidental de la víctima tras atragantarse

Imagen de Google Maps de la vivienda del fallecido, en Palau-Solità i Plegamans
Imagen de Google Maps de la vivienda del fallecido, en Palau-Solità i PlegamansGoogle Maps

Mientras los investigadores de los Mossos d’Esquadra siguen investigando el macabro asesinato en Palau-Solità i Plegamans, en el que murió un hombre, en las pocas horas se han dado a conocer más detalles sobre el asunto.

Por ejemplo, que los dos perros del hombre, que apareció muerto en su casa con los genitales amputados, se comieron partes del cuerpo del cadáver. La novedad choca con lo dicho en un principio, que era que los animales no habían tenido apenas contacto su amo una vez fallecido.

Así lo han detallado fuentes cercanas de la investigación, detallando que los dos animales convivían con la víctima que perdió la vida al atragantarse mientras comía y que, según han asegurado los Mossos d’Esquadra, falleció de forma accidental.

Esta es la conclusión a la que ha llegado la policía catalana después de obtener los resultados de la autopsia practicada en el Instituto de Medicina Legal.

La víctima mortal se llama Manel y tiene entre 70 y 80 años, según se ha dado a conocer. Vivía solo en la calle Mossèn Cinto Verdaguer, en el centro de la población vallesana.

El cadáver presentaba una amputación de los genitales, que estaban separados del cuerpo del hombre, y estaba rodeado de excrementos de animales, de los dos perros que vivían con él en una pequeña casa.

En el momento en que los policías encontraron el cadáver del hombre, al ser alertados por los vecinos, de que hacía tiempo que no veían al hombre, activaron la investigación.

A pesar de tener los genitales amputados, el cadáver del hombre no presenta otros signos de violencia. Serán las pruebas forenses las que podrán esclarecer cómo murió. La policía no descarta la participación de una tercera persona en la escena del crimen, pero ahora mismo, no se investiga como tal. El corte de los testículos, hechos con una herramienta precisa, no se puede imputar a los perros, según los investigadores.