Entrevista

“La dermatitis atópica ha aumentado y afecta entre el 15% y el 30% de los niños”

La pediatra Mercedes Escarrer, coordinadora del grupo de dermatitis atópica y alergia cutánea de SEICAP, da las claves

La pediatra Mercedes Escarrer
La pediatra Mercedes EscarrerLa Razón

A raíz del Día Internacional de la dermatitis atópica, la Sociedad Española de Inmunología Clínica Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP) advierte que muchas familias subestiman la gravedad de la dermatitis atópica y no llevan a sus hijos al especialista, lo que puede acabar provocando un empeoramiento de los síntomas. Es por ello que destaca la necesidad de sensibilizar a la población acerca de la importancia de un diagnóstico precoz y la puesta en marcha de un tratamiento eficaz para poder prevenir los brotes de dermatitis y mejorar la calidad de vida del niño o niña con eczema.

¿Qué es la dermatitis atópica?

Es una enfermedad inflamatoria de la piel, en la que ésta pierde la función barrera y eso provoca que todos los irritantes, como pueden ser el frío y los alérgenos, irriten la piel, la sequen y produzcan un prurito, un picor muy intenso. Es una enfermedad crónica que evoluciona a brotes, es decir que los niños con dermatitis atópica no tienen eczema todo el tiempo, sino que hay momentos en los que la piel está bien y otros en los que tiene un brote de eczema. Por ejemplo, normalmente, en invierno, el frío seca la piel y entonces hay más riesgo de eczema, igual que si abrigamos demasiado a estos niños, ya que el sudor favorece el brote de dermatitis atópica, como sucede también con las fibras sintéticas y acrílicas.

¿Cuál es su prevalencia?

Su incidencia ha aumentado entre 2 y 3 veces en los países industrializados durante las últimas tres décadas, afectando entre el 15 y 30% de los niños . El aumento de prevalencia podría estar vinculado con un modo de vida occidental: ropa acrílica, niño que hace mucha actividad física...De hecho, la incidencia aumenta más en los países occidentales que en los orientales. En cualquier caso, lo más frecuente, casi en el 60% de los casos, es que la enfermedad debute antes del año de vida. Es una enfermedad sobre todo infantil y muchos de ellos, cuando llegan a la edad adulta, ya no tienen dermatitis atópica, aunque en algunos casos ésta persiste.

¿Cuáles son sus síntomas?

La piel está seca, áspera, y en la zona donde hay eczema, la piel está roja e inflamada. Es característico en los lactantes que se manifieste, sobre todo, en la cara y la superficie de extensión de las extremidades, pero cuando el niño es más mayor, sobre todo afecta a los pliegues, como la flexura del codo o de la rodilla.

¿Existen factores que agravan los signos de la enfermedad?

Sí, sobre todo que la piel esté seca, por eso es muy importante hidratarla y eso hay que hacerlo después del baño, porque la piel está húmeda. Además, hay que evitar el exceso de ropa para que el niño no sude, asi como las firbas sintéticas, hay que lavar a estos niños con jabones especiales para pieles atópicas, que son jabones formulados con un PH especial y que no llevan ningún tipo de perfume, y la ropa debe lavarse con detergentes suvaes y la temperatura de la casa no tiene que estar ni muy fría ni muy caliente y normalmente se aconseja entre 20 y 22 grados.

¿Como se trata?

Cuando tenemos un brote, cuando hay eczema en la piel, se trata con el antiinflamatorio más potente que tenemos, que son los corticoides tópicos, que se ponen sobre la piel que está roja una o dos veces al día, hasta que la piel se restaura y deja de tener eczema. En cualquier caso, es muy importante para prevenir esos brotes, la hidratación de la piel. Además, la condición de la dermatitis atópica es que tiene que picar y, a veces, ese prurito es muy intenso y altera el sueño al niño, por eso, cuando el picor es muy intenso, primero hemos de tratar el eczema y luego, dar antiestáminicos, que lo que harán es disminuir el picor.

¿Existe infradiagnóstico? ¿Cómo es de relevante el diagnosticar y tratar la dermatitis atópica de forma temprana?

Es muy importante tratarla de forma temprana porque, como hemos dicho, el 65% va a debutar antes del año de vida y es clave hidratar bien la piel a ese lactante, sobre todo cuando los padres tienen dermatitis atópica, porque si uno de los padres tiene alergia, el niño tiene 2 o 3 veces más riesgo de sufrir dermatitis atópica y cuando son los dos padres los que tienen alergia, el niño tiene hasta 5 veces más riesgo de desarrollar dermatitis atópica. Por eso es importante que, si tenemos un bebé con antecedentes familiares de alergia, le hidratemos y cuidemos mucho la piel. Y es que a veces la dermatitis atópica es el inicio de lo que llamamos la marcha atópica: el bebé empieza teniendo dermatitis atópica, luego hace alergia alimentaria y luego desarrolla asma y rinitis alérgica. Por todo ello, es tan importante cuidar esa piel para restaurar su función barrera y que los alérgenos no puedan entonces penetrar en la piel y asó evitar esa marcha atópica. Pero lo que ocurre a veces es que muchos de estos niños son más mayores y, además de tener dermatitis atópica, tienen asma o rinitis, la familia da más importancia al asma, porque cursa con dificultad respiratoria, también bajará la recaudación. Por eso, cuando vienen a la consulta, hemos de insistirle que, además de tratar el asma, hemos de cuidarle la piel para que el niño tenga una buena calidad de vida. Así pues, a veces no se da tanta importancia a la dermatitis atópica porque el niño tiene unas patologías que sus padres consideran que son más graves.