Feria del libro

La literatura catalana aterriza en Londres

La feria del libro de la capital británica dedica su «spotlight» a autores como Irene Solà o Eva Baltasar

Feria del libro de Londres
Feria del libro de LondresLa Razón

Ha pasado mucho tiempo desde que la cultura catalana fue la invitada en la Feria de Fránkfurt de 2007. Aquellas viejas polémicas sobre qué es literatura catalana han quedado afortunadamente en un segundo plano para que el protagonismo sea de la internacionalización de los autores de Cataluña. En este sentido, una de las más importantes acciones tendrá lugar este martes con la inauguración de la nueva edición de la Feria del Libro de Londres en la que se cuenta con un programa concreto titulado «Spootlight. Books in Catalan». Esta iniciativa supone el desembarco de autores, editores y agentes que quieren entrar en el mercado anglosajón. La feria, no hay duda de ello, es el mejor escaparate para este hecho, un evento editorial que es el más importante de Europa tras Fránkfurt y el primero en lengua inglesa. Escritores como Irene Solà, Sergi Pàmies, Eva Baltasar, Aina Bestard, Raül Garrigasait, Borja Bagunyà, Marta Orriols y Josep Maria Esquirol participaran en una serie de diálogos con sus homónimos británicos, como Max Porter, Jay Griffiths, Daisy Johnson o David Constantine. Todo esto tendrá lugar entre el 5 y el 7 de abril.

Cataluña llega a la capital londinenses con buenas credenciales. Tanto el Ramon Llull como la agente literaria Anna Soler-Pont recibirán el premio a la excelencia de la Feria del Libro de Londres. Es la culminación de un proceso que empezó a andar en 2017 con la complicidad del Institut Català de les Empreses Culturals.

Es una operación ambiciosa porque la literatura catalana no tiene en estos momentos al mercado anglosajón como uno de sus principales ejes en el terreno de la traducción. En este sentido, según informa el mismo Ramon Llull, es evidentemente el castellano la lengua a la que se traducen buena parte de los autores catalanes, tanto actuales como clásicos. Le siguen el italiano -que representa el quince por ciento de las traducciones de escritores en lengua catalana-, el francés y el alemán. El inglés queda perdido en un séptimo lugar.

Probablemente sea en la actualidad «Canto jo i la muntanya balla», de Irene Solà, el principal fenómeno editorial catalán. Al aplauso de público y crítica de esta obra premiada con el Llibres Anagrama de Novel·la se le suma el gran número de traducciones alcanzadas desde su primera edición en 2019. En Reino Unido Granta tiene los derechos y en Estados Unidos Graywolf, además de editarse en Dinamarca, Francia, Alemania, Grecia, Italia, Bulgaria, Hungría, Serbia, Turquía, Brasil o Ucrania. Toda una hazaña. Otro autor que llega a la lengua inglesa pisando fuerte, también de la escudería Anagrama, es Pol Guasch cuyo «Napalm al cor» aparecerá en Gran Bretaña de la mano del gigante Faber.

En el terreno de los clásicos, Mercè Rodoreda sigue siendo el gran nombre de referencia, especialmente gracias a «La plaça del diamant», novela que actualmente tiene la estadounidense Taplinger en su catálogo mientras que en Reino Unido aparece de la mano de Little Brown. En la actualidad trece títulos del catálogo de la escritora están publicados en Estados Unidos mientras que en Gran Bretaña solamente han aparecido cuatro. No se puede olvida que el otro gran clásico de la literatura catalana del siglo XX, Josep Pla, es ahora cuando está empezando a tener más eco en el mercado anglosajón gracias, especialmente, a la traducción que en 2014 se hizo de «El quadern gris», una importante operación en la que intervino el Llull y que debe mucho al empeño del New York Review of Books.

Esta llegada catalana a la City no solo traerá libros sino que contará con otras disciplinas. Por ejemplo, el Institute of Contemporany Arts programará entre el 9 de abril y el 29 de mayo un ciclo dedicado al cine realizado en Cataluña y que permitirá la proyección de títulos como «Magaluf Ghost Town» de Miguel Ángel Blanca, «Sediments», de Adrian Silvestre, «Libertad» de Clara Roquet o «Sis dies corrent» de Neus Bellús.

A nivel artístico, la Bienal de Venecia sigue siendo otro de los espacios principales para la divulgación de la cultura catalana en todo el mundo. En este sentido, el pasado viernes se presentó la propuesta que se verá este año en la ciudad de los canales a partir del próximo día 23 y hasta el 27 de noviembre. Será una instalación sobre la «dualidad» del agua y el vidrio de la artista mallorquina Lara Fluxà la que llegará al espacio Catalonia in Venice en el Eventi Collaterali de bienal.