Polémica película

La Fundació Dalí rechaza la película sobre el pintor por Ben Kingsley

“Daliland” se estrena en el Festival de Toronto sin haber sido consultada por la entidad que defiende al artista

Ben Kingsley como Salvador Dalí, en la película Dali Land
Ben Kingsley como Salvador Dalí, en la película Dali Landlarazon

El próximo día 11 el Festival de Toronto, en su jornada de clausura, acogerá el estreno mundial de “Daliland”, una película que trata de reflejar el mundo personal de Salvador Dalí, en esta ocasión interpretado por Ben Kingsley, bajo la dirección de Mary Harron, conocida por ser la realizadora de títulos como “American Psycho”. La cinta, pese a centrarse en la vida y la obra del gran artista surrealista, no ha buscado el apoyo de la Fundació Gala-Salvador Dalí, entidad que controla los derechos del genio de Figueres.

La institución daliniana acaba de emitir un comunicado en el que denuncia esta situación. La película se estrena “sin el visto bueno de la Fundación, que no ha tenido la oportunidad de visionarla previamente y ejercer sus funciones en tanto que responsable de proteger la obra y la imagen del pintor”.

La fundación se enteró por la prensa del estreno de “Daliland”. Fue en ese momento cuando trató de ponerse en contacto con la productora de esta película “para regularizar los derechos”. Hasta este momento no ha recibido respuesta alguna.

Todo ello lleva a esta institución, en su papel de administradora universal de los derechos de Dalí, a “reservar el derecho de ejercer las acciones legales que crea conveniente para salvaguardar el buen nombre del artista y su actividad creadora, del Teatro-Museo y de la Fundació Dalí”.

“Daliland” es un proyecto que ha estado dando vueltas durante años y que tomaba como punto de partida el controvertido y bochornoso libro de Stan Lauryssens “Dalí y yo”. Durante años se acarició la idea de que la producción fuera protagonizada por Al Pacino, un actor que aseguró que llevaba muy adentro la posibilidad de ponerse en la piel de Dalí, pero la cosa no salió adelante. No fue hasta el año pasado que la cinta conoció el impulso definitivo de la mano del oscarizado Ben Kingsley. Sorprendentemente el equipo ha preferido no acercarse a los escenarios reales dalinianos, como Port Lligat o Figueres, y ha decidido recrear todo esto en las costas británicas.

El argumento de la película nos lleva hasta 1973, Corre el año 1973. Es en ese momento cuando James (Christopher Briney), empleado de una galería de Manhattan, comienza vincularse con el entorno de Dalí (Ben Kingsley) y Gala (Barbara Sukowa). Al primero le gusta la perspicacia y la reverencia de James; este último imagina su rostro angelical y su físico juvenil. James pronto estará trabajando para la pareja, monitoreando la productividad de Dalí mientras se avecina una exhibición y disfrutando del extravagante glamour de su camarilla, que incluye a Alice Cooper (Mark McKenna). Sin embargo, cuanto más ve James, más llega a comprender la grotesca codependencia de sus empleadores y cuántos de sus asociados están cometiendo pequeños actos de fraude.

En su momento, el libro de Lauryssens fue criticado por afirmar, sin prueba alguna, que Dalí no pintaba sus cuadros en este periodo, además de aseverar que hasta el bigote de Dalí era postizo. Posteriormente se ha sabido que muchos de los datos aportados por el autor en peculiar título de memorias eran inventados. Se desconoce si la película los ha tomado como buenos, pero es evidente que no cuentan con el apoyo de la fundación.