Parlament

El PP acusa a Aragonès de "perroflautismo contemplativo"

El líder de los populares en el Parlament, Alejandro Fernández, considera que el Govern está instalado en la política del "no a todo" ideada por la CUP y así se lo ha hecho saber al presidente de la Generalitat durante la sesión de control a través de este nuevo concepto

El líder del PP en Cataluña, Alejandro Fernández durante su intervención en la segunda jornada del debate de investidura
El líder del PP en Cataluña, Alejandro FernándezAlberto EstévezAgencia EFE

El presidente del PP en Cataluña, Alejandro Fernández, ha acusado al Govern en sede parlamentaria de perpetrar lo que el líder popular ha bautizado como "perroflautismo contemplativo". Esta práctica consiste, según Fernández, en "su cultura del no a todo, que se ha impuesto en Cataluña", en relación a las palabras de rechazo del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, respecto al Hard Rock, un complejo hotelero y de salas de juego que se pretende construir en la costa de Tarragona. Para la formación popular, la culpa la tiene la CUP, que pese a "no pasar por su mejor momento electoral, han conseguido una victoria indiscutible de su modelo a través de diez años acondicionando a ERC y a Junts".

La intervención del diputado también ha hecho referencia a otros proyectos que el Govern rechaza y su formación defiende, como la B-40 o la ampliación del aeropuerto. "¿De qué demonios pretenden que se gane la vida la gente? Del perroflautismo contemplativo solo podrán vivir los niños de papá, el resto de los mortales nos tendremos que ganar la vida de alguna manera", ha dicho Fernández, que ha instado al ejecutivo a cambiar su manera de obrar en este sentido. Asimismo, ha interpelado a Aragonès: "No tiene usted aspecto de peligroso revolucionario marxista, pero en algunas ocasiones obra como tal".

A pesar de las alabanzas que ha suscitado tanto el discurso del líder popular como la retórica empleada -además de un buen número de visualizaciones en las redes sociales-, no ha sido el presidente de la Generalitat uno de los tantos diputados a quiénes se le ha escapado una sonrisa. "Lo ha intentado pero no me ha hecho gracia, porque la frivolidad puede ser una buena herramienta retórica pero es una mala manera de hacer política," ha contestado Aragonès, que le ha dado la vuelta al discurso. "Son ustedes quienes representan la cultura del no", ha concluido.