Asombro cósmico

La NASA celebra el legado de Edwin Hubble: el descubrimiento que reveló un nuevo universo

Este hallazgo no solo amplió el entendimiento del cosmos, sino que cambió para siempre la manera en que la humanidad se ve a sí misma

La NASA celebra el descubrimiento de un nuevo universo por parte de Edwin Hubble
La NASA celebra el descubrimiento de un nuevo universo por parte de Edwin HubblePexels

Hace cien años, una pequeña estrella parpadeante llamada V1 cambió el curso de la historia. Descubierta por Edwin Hubble en la galaxia de Andrómeda, esta estrella, imperceptible para el ojo humano, iluminó un nuevo universo, un vasto océano de galaxias más allá de la Vía Láctea. Hoy, la NASA y la comunidad científica conmemoran este hito, que marcó el inicio de una nueva era en la exploración del cosmos.

Hubble, utilizando el telescopio Hooker de 100 pulgadas en el Observatorio Mount Wilson, logró demostrar que la "nebulosa" de Andrómeda no era parte de nuestra galaxia, sino un mundo entero en sí mismo, ubicado a millones de años luz de distancia. Este descubrimiento no solo rompió las fronteras del universo conocido, sino que también cambió para siempre la percepción de la humanidad sobre su lugar en el cosmos.

El universo más allá de los límites humanos

Antes de Hubble, muchos astrónomos creían que la Vía Láctea era todo el universo. Sin embargo, la estrella V1, una variable cefeida utilizada como "cinta métrica cósmica", demostró que el universo era mucho más vasto de lo que nadie había imaginado. Este hallazgo, sustentado por las teorías del astrónomo Henrietta Swan Leavitt, reveló una verdad desconcertante: nuestra galaxia es solo una entre cientos de miles de millones.

El impacto fue inmediato. Científicos como Harlow Shapley, defensor de un universo limitado, se vieron obligados a reconsiderar sus ideas. La cosmología, como disciplina, floreció de la noche a la mañana.

El legado de Hubble: de Andrómeda al Big Bang

La observación de Hubble no solo redefinió los límites del universo; también reveló que este se encuentra en constante expansión. Al estudiar el corrimiento al rojo de las galaxias, Hubble descubrió que cuanto más lejos están, más rápido parecen alejarse. Este fenómeno, complementado por las ideas del físico Georges Lemaître, sentó las bases para la teoría del Big Bang.

Años después, el telescopio espacial Hubble, lanzado en 1990, continuó su legado, permitiendo a los científicos explorar las profundidades del universo con una precisión sin precedentes. Este instrumento ha capturado imágenes icónicas, como el Campo Profundo de Hubble, mostrando miles de galaxias en un solo parche del cielo, y ha ayudado a desentrañar misterios como la energía oscura y la aceleración cósmica.

Un universo en expansión, una humanidad más pequeña

Aunque el telescopio Hubble continúa siendo una herramienta esencial, nuevos observatorios como el telescopio espacial James Webb y el futuro telescopio Roman prometen ampliar aún más nuestra comprensión del universo. Estas misiones buscan responder preguntas fundamentales sobre la naturaleza de la materia oscura, la energía oscura y la formación de las primeras galaxias.

Hoy, unos cien años después del descubrimiento de V1, la humanidad sigue explorando el cosmos con el mismo espíritu curioso que impulsó a Edwin Hubble. Su legado no solo redefinió los límites del universo, sino también nuestra visión sobre nuestro lugar en él.