La sentencia del metro que condena a cuatro acusados, acaba con 14 años de vicisitudes judiciales

El juzgado de lo Penal número 6 de Valencia ha sentenciado hoy a los ocho acusados de la causa que juzga el accidente del metro de 2006, con la condena de cuatro, pactada por la Fiscalía, y la absolución de otros cuatro, como una de las medidas del pacto, y en contra de la voluntad de esto cuatro absueltos.

La juez ha dictado la sentencia “in voce” en la que condena a los cuatro acusados a 22 meses de prisión al considerarlos autores materiales -por omisión o cooperación necesaria- de 43 delitos de homicidio por imprudencia grave profesional y 47 delitos de lesiones en el mismo sentido, así como un delito contra los derechos de los trabajadores en el ámbito de la seguridad e higiene. El acuerdo con la Fiscalía conlleva que no se celebren las vistas del proceso, previstas hasta el mes de junio de este año, y que ninguna de las partes recurra la sentencia. Este extremo solo ha sido posible retirando la acusación a los otros cuatro acusados, que no se han avenido al pacto con la fiscal y pretendían que se enjuiciara la causa con la esperanza de salir absueltos. Curiosamente, una de las personas absueltas ha sido la gerente de Ferrocarrils de la Generalitat, Marisa Gracia, superior jerárquica de los condenados, que no ha aceptado el pacto con la Fiscalía, y que tras la celebración de la vista de hoy, ha dicho no reconocer ninguna culpabilidad en el fatal accidente.

Así las cosas, por el acuerdo con le Ministerio Público y las acusaciones particulartes, se retira la acusación para Marisa Gracia Jiménez, Gerente de FGV en la fecha de los hechos; Luis Domingo Alepuz , Jefe de Taller en la fecha de los hechos; Manuel Sansano Muñoz, director de operaciones, y Francisco Orts Pardo , jefe de Estudios y Proyectos y responsable de la Oficina Técnica. Por otra parte, conforman sentencia Vicente Contreras Bórnez , Juan José Gimeno Barberá, Francisco García Sigüenza y Sebastián Argente Cuesta , miembros de Comité de Seguridad FGV , “que asumen las deficiencias que pudiere haber habido en cuanto a las infraestructuras, material móvil, falta de control de la velocidad, inexistencia de baliza o reprogramación de las existentes previas a la curva del accidente, inexistencia del plan de seguridad y de riesgos laborales”. Y por ello son condenados a un año y diez meses de prisión por un delito contra los derechos de los trabajadores, en su modalidad de seguridad e higiene en el trabajo, en concurso ideal con 43 delitos de homicidio, por imprudencia grave profesional, y con y 37 delitos de lesiones, por imprudencia grave profesional. Se les aplica la circunstancia atenuante de dilaciones indebidas en todos los condenados y la atenuante analógica de confesión.

Durante la vista del juicio celebrada esta mañana, tanto la Fiscalía como las acusaciones particulares de la Asociación de Víctimas y de otros afectados, han mostrado su parecer con el acuerdo, mientras que las defensas de los ocho acusados se han limitado a aceptar la sentencia “in voce” con el compromiso de no recurrirla, por lo que ya es firme.

Así, la Fiscalía ha señalado por si cabía alguna duda sobre las responsabilidades en el accidente que “no cabe dudar porque los cuatro acusados han reconocido los hechos” y ha concretado que los daños son “las muertes y las lesiones”

Por su parte, el abogado de la Asociación de Víctimas del Metro ha explicado que “estamos hablando de una imprudencia, pero a los cuatro condenados se les reprocha que no cumplieran con su trabajo. Eran funcionarios y estaban cobrando de todos. Por eso el reproche tiene que ser intenso”. También ha incidido en que “la asociación de víctimas nunca ha querido venganza” y ha cargado duramente contra la juez instructora que en dos ocasiones archivo la investigación que según el letrado ha sido “entrecortada por la contumancia de una instructora y la incomprensible labor que ha hecho”. También tuvo palabras contra la Fiscalía “del principio, no la de ahora con la que me honro de compartir mesa". Ha concluído “que la pena no solo mira a lo que ha pasado sino también al futuro. Y si vemos que las dilaciones indebidas han impedido a los condenados defenderse antes y este asunto hubiese acabado hace mucho tiempo. Y como acaba ahora por el mal hacer de un órgano jurisdiccional, tenemos que doblegarnos a lo que dice el derecho: un año y diez meses. La pena se va a cumplir pero no en prisión, porque la prisión no iba a devolver a las víctimas y porque la satisfacción jurídica además de la moral se consigue en este acto".

El resto de las acusaciones han suscrito las palabras del letrado de la Asociación de Víctimas, reiterando, eso sí, que no buscan venganza

Tras la breve vista, los ocho procesados han abandonado la Ciudad de la Justicia sin hacer declaraciones, tan solo la exgerente, Marisa Gracia, ha mantenido su posición de negar cualquier responsabilidad en el accidente.

La Asociación de Víctimas del Metro sí que ha mostrado su satisfacción y su emoción por “cerrar un proceso duro que ha durado catorce años”