Sindicat d’Estudiants anuncia una huelga para el día 11 de febrero y pide suspender las clases por la pandemia

El Sindicat d’Estudiants ha anunciado este martes que el próximo 11 de febrero llevará a cabo una huelga en los centros educativos, “que ya ha sido votada en más de 20 centros”.

Así lo ha confirmado el coordinador del Sindicat d’Estudiants, Carlos Naranjo, quien ha afirmado que esta huelga se debe a la “crítica situación sanitaria y educativa en la que nos encontramos” y por la que ha pedido la paralización de la actividad lectiva y productiva hasta doblegar la curva y esta se sitúe en, “como mucho”, 250 puntos de incidencia acumulada en los últimos 14 días.

Naranjo ha defendido que esta es una situación de “emergencia sanitaria” y que “por mucho que digan que no es crítica, los datos demuestran cómo de grave es este problema”, en el que la educación es “uno de los sectores más afectados” y en el que “se deben adaptar los planes de estudios hasta doblegar la curva”, la cual es “exagerada”.

Ha detallado que este martes se han conocido siete brotes en el ámbito educativo tras conocer la semana pasada un “macrobrote” de 48 personas en València y ha denunciado que son 900 los grupos confinados actualmente en la Comunitat, “en una cifra que se ha triplicado en las últimas semanas”, para afirmar después que hay 6.000 estudiantes y 1.200 profesores con casos activos de coronavirus.

Por ello, Naranjo ha asegurado que la situación “es mucho más grave que en la primera ola, por lo que no entendemos cómo desde la Conselleria de Educación se ocultan tanto los datos”.

El coordinador del Sindicat d’Estudiants ha calificado de “fracaso” las medidas más restrictivas implementadas, ya que “se han priorizado los intereses de cuatro empresarios”, mientras, ha aseverado, “las ratios son de casi 30 alumnos por clase cuando no se pueden juntar más de dos personas por la calle”.

También ha advertido de que estas medidas “rompen con una capa muy grande de las familias trabajadoras, a las que decepcionan profundamente” y, según ha asegurado, “puede tener graves consecuencias electorales”.

“Hay que estar a la altura de las circunstancias”, ha afirmado Naranjo en referencia a la comunidad educativa, y ha defendido que es el Sindicat de Treballadors de l’Ensenyament del País Valencià (Stepv) el que tiene “la responsabilidad de movilizar al profesorado para una huelga de la comunidad educativa”.

Así, ha pedido apoyo al Stepv y ha reclamado al Consell un plan de choque tanto para la sanidad pública como también para la educación pública, con tal de que haya profesores suficientes para ejecutar los protocolos y ha concluido que “no hay excusas para tomar estas medidas”.