Seguridad

La Policía de Llíria no tiene alcoholímetro para realizar controles

El contrato de mantenimiento con la empresa no se ha renovado por Tráfico, según el SPPLB

El alcoholímetro fue enviado para su calibrado
El alcoholímetro fue enviado para su calibradolarazon

El Sindicato de Policías Locales y Bomberos (SPPLB) ha denunciado que la ciudad de Llíria no cuenta con alcoholímetro desde hace meses después de que se enviará para su comprobación y calibrado y no hay sido devuelto al no tener actualmente contrato de mantenimiento con la empresa que se hacia cargo de esta tarea.

Todo ello desde hace ya más de un año, con lo cual los Policías Locales no pueden realizar uno de sus cometidos “exclusivos” realizar controles y pruebas de alcoholemia dentro del casco urbano.

Estamos hablando del instrumento de precisión utilizado por todas las policías locales de España en su día a día, que sirve para medir el grado de intoxicación alcohólica que presenta el conductor en su organismo y que, además, resulta necesario en la investigación de accidentes y controles preventivos de alcoholemia. Su coste, según marca y modelo, ronda entre los ocho mil y los diez mil euros.

La dotación del mismo, en la mayoría de los municipios, como es el caso de Llíria, corre a cargo de la Jefatura Provincial de Tráfico a través de la firma de un convenio suscrito con las diferentes administraciones locales con el compromiso de realizar campañas de tráfico y seguridad vial. Por otro lado, el etilómetro está sujeto a un riguroso control metrológico anual por parte de la empresa con quien la DGT tiene suscrito un contrato de mantenimiento.

La dotación del mismo, en la mayoría de los municipios, como es el caso de Llíria, corre a cargo de la Jefatura Provincial de Tráfico a través de la firma de un convenio suscrito con las diferentes administraciones locales con el compromiso de realizar campañas de tráfico y seguridad vial. Por otro lado, el etilómetro está sujeto a un riguroso control metrológico anual por parte de la empresa con quien la DGT tiene suscrito un contrato de mantenimiento.

Los antecedentes de los hechos se remontan, hace ahora algo más de un año, cuando los responsables del Cuerpo de la Policía local enviaron a la Jefatura Provincial el etilómetro de dotación para su calibrado. Mientras tanto, y como suele ser costumbre, en caso de necesidad podrían solicitarlo al municipio más cercano que dispusiera del mismo. Tratándose de un trámite ordinario, no suele demorarse más de quince o veinte días. Pero pasados unos meses sin recibirlo, y tras contactar con la Jefatura Provincial fueron informados de que el problema radicaba en la no renovación del contrato de mantenimiento de los etilómetros marca Dräger con la empresa adjudicataria, desconociendo la fecha de su posible renovación y, además, de la imposibilidad, mientras tanto, de la entrega de etilómetros de sustitución a los municipios afectados.

Posteriormente, y siempre según la información de la SPPLB, los responsables locales con la clara intención de buscar una solución al problema, contactaron nuevamente con la Jefatura Provincial y les plantearon la posibilidad de asumir ellos mismos el control metrológico del instrumento a través de un centro especializado. La misiva no sirvió de nada, la Jefatura Provincial en respuesta argumentó que la propiedad es de la DGT y que, por tanto, no puede corresponder a los ayuntamientos. La situación actual es que los etilómetros pendientes de revisión se encuentran acumulados y polvorientos en algún lugar de la Jefatura Provincial, lo que deja a muchos municipios valencianos y a sus agentes locales a expensas del préstamo de un material de trabajo que puedan o no realizarle otros municipios limítrofes, según la SPPLB.