Dependencia de China: las compras valencianas al país asiático se duplican en los últimos 15 años

China se ha convertido en el principal proveedor externo de la Comunidad Valenciana durante los últimos años, una dependencia que ha ido aumentando hasta representar el 5 por ciento del PIB de la región. Este porcentaje supera con creces al de la economía española, donde representa el 3,7 por ciento del PIB.

Aunque la dependencia del país asiático es un denominador común tanto en España como en toda la Unión Europea (UE), en el caso de la Comunidad Valenciana China es el principal proveedor externo desde el año 2008, suponiendo en 2022 el 15,7 pro ciento del total de importaciones valencianas. Esta situación constrasta con la del resto de España, donde la China ocupó la primera posición el año pasado, desbancando a Alemania.

En términos de PIIB la relevancia de China como proveedor de bienes ha crecido a lo largo de las últimas dos décadas, siendo especialmente intensa durante los últimos tres años. En el caso de la Comunidad Valenciana el peso de las importaciones de la región a este país se ha duplicado en los últimos 15 años.

Estos son los datos que se desprende del informe "El potencial del mercado chino para la Comunidad Valenciana" elaborado por Cámara Valencia, en el que se explica que el continuo aumento de las importaciones de China y de su peso en el conjunto de la economía valenciana y europea se produce a pesar de hallarnos en un contexto internacional de acortamiento de las cadenas de valor, aumento de los costes logísticos en 2021 y, en menor medida 2022, y tensiones en los suministros de materias primas y semimanufacturas.

Pero, ¿a qué se debe un incremento tan llamativo? Pues, según se destaca en el informe, principalmente a la compra de placas fotovoltaticas y diodos. Ambos productos representaron el 87,4 por ciento de los bienes importados desde China durante el año pasado, seguidos de los productos de calzado, que representaron el 55,5 por ciento. Según se destaca en el documento de Cámara Valencia, la aceleración de las tendencias en sostenibilidad y transición energética durante los dos últimos años han provocado un importante crecimiento de las importanciones chinas de algunos productos de los somos altamente dependientes, como son las placas fotovoltaicas y los diodos, utilizados para la fabricación de patinetes eléctricos.

Pero también se ha acentuado la dependencia de China entre las principales importaciones de bienes de consumo que proceden de este país, como son los baúles, maletas, artículos confeccionados, aparatos de alumbrado, asiento, vajilla de plástico, artículos de deporte o televisores.