La desorbitada cantidad de dinero que ha pagado The Weeknd para actuar en la Super Bowl 2021
El artista canadiense quiso que los espectadores que siguieron la final de la NFL por televisión disfrutaran de un “espectáculo cinematográfico”
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Los Tampa Bay Buccaneers de Tom Brady se llevaron la Super Bowl tras imponerse a los Kansas City Chiefs del joven Patrick Mahomes por 31-9. Pero la final de la NFL, la liga de fútbol americano de Estados Unidos, es mucho más que un espectáculo deportivo. La repercusión que tiene el evento atrae tanto a amantes del deporte como a curiosos que lo que realmente quieren ver es la tradicional actuación del descanso.
The Weeknd fue el elegido para el show de medio tiempo de la 55 edición de la Super Bowl, que este año se ha celebrado en el Raymond James Stadium, en Tampa (Florida). No obstante, el autor del éxito mundial ‘Blinding Lights’ ha tenido que desembolsar una millonada para poder hacer el espectáculo tal y como se lo imaginaba. El artista canadiense ha gastado 5,7 millones de euros (7 millones de dólares) de su propio bolsillo, según explicó su representante Wassim Slaiby en una entrevista en la revista Billboard, con el objetivo de intentar estar a la altura de Jennifer López, Shakira, Beyoncé o Katy Perry, otras de las intérpretes que han actuado en años anteriores.
La organización del evento suele hacerse cargo de todos los gastos de producción, por lo que no es habitual que los artistas tengan que invertir tanto dinero en el espectáculo. The Weeknd lo ha hecho para que los espectadores que siguen el partido por la televisión puedan disfrutar de una “experiencia cinemátográfica”, comentó Slaiby.
“Siempre tuvimos la Super Bowl en nuestra lista de deseos, y siempre establecemos plazos para todos los objetivos que tenemos. Esto llegó unos pocos antes de lo esperado”, dijo Amir “Cash” Esmailian, otro de los integrantes detrás de The Weeknd.
Ausencia en los Grammys
El éxito de The Weeknd durante la pandemia ha sido incuestionable, pero curiosamente los premios no han acompañado a los cientos de millones de escuchas que acumula el artista, cuyo nombre real es Abel Makkonen Tesfaye. La ausencia del autor en los Grammys de este año, que se entregarán el próximo 14 de marzo, ha soprendido a mucha gente, incluido al propio Tesfaye. “Los Grammy siguen corruptos. Me deben transparencia a mí, a mis fans y a la industria la transparencia...”, tuiteó horas después de que la Academia de la Grabación de Estados Unidos anunciara sus candidatos a la 63 edición de los galardones.