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Aramburu se harta de Twitter: las otras figuras que también han dicho “basta”

El escritor de “Patria” se une al grupo de valientes que deciden apartarse de esta red social “para centrarme exclusivamente en la escritura”, explica

Aramburu se harta de Twitter: las otras figuras que también han dicho “basta”
Aramburu se harta de Twitter: las otras figuras que también han dicho “basta”John RaouxAP

Las redes sociales cansan, desgastan y entretienen sin límite, lo que es un potencial peligro para aquellos que no quieren perder el tiempo. Entre ellas, Twitter reluce por ser caldo de cultivo de debates de todo tipo, sea sociales, políticos, económicos, vulcanólogos o lo que la actualidad pida. Cada usuario de Twitter, como quien lo gestiona, es un mundo, lo que provoca, a veces, el cansancio de algunos valientes que deciden, finalmente, cerrar sesión. Y el último en sumarse a esta ola de desconexión ha sido Fernando Aramburu. El escritor y autor de “Patria” anunciaba ayer a través de su perfil de Twitter que “me despido de esta red para centrarme exclusivamente en la escritura. En adelante, la editorial Tusquets (@TusquetsEditor) gestionará este perfil y dará cuenta de mi obra y todo lo que a ella afecte”.

Una decisión tomada, por tanto, para evitar la distracción. El autor ha decidido levantar la cabeza y centrar su mirada en otra pantalla, pero en la que tan solo existan él y sus ideas literarias. Una concentración, además, que ha compartido con otras figuras públicas que han decidido en este último tiempo abandonar las redes sociales y, en concreto, Twitter. Fue el caso, por ejemplo, de Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, el pasado abril. En su perfil aún puede verse su mensaje de despedida: “He decidido dejar Twitter con carácter indefinido. Creo que hoy no me ayuda a hacer buena política y por ello lo dejo. Seguiré en otras redes menos polarizadas y menos aceleradas”, explicaba.

También el director Javier Ambrossi dejó la red social en 2018, tras una serie de críticas que recibió su amiga Dulceida: “Estamos llegando a unos límites de radicalismo que no comparto y que rozan el peligro”, decía. Y, por cierto, la influencer también decidió abandonar Twitter tras la misma polémica, pero esta vez sin dar explicaciones. Según recogió entonces la revista “Divinity”, una persona cercana a Dulceida explicó que “está harta de las críticas feroces y gratuitas. Twitter se ha convertido en una red social de odio profundo, en la que la gente se permite insultar y vejar sin revelar su identidad”.

Este último detalle es, quizá, el más peligroso de Twitter, pero también de cualquier red social. En la red del pájaro azul todo cabe. Una persona puede tener todas las cuentas que desee, puede publicar lo que desee y se puede entrometer en la vida de quien desee. Por tanto, esto afecta más a quien más seguidores tiene, que suelen ser las figuras públicas, ya sean políticos, actores, cantantes, influencers, escritores o empresario. Por ejemplo, fue el caso de Guillermo Solana, director artístico del Museo Thyssen-Bornemisza, quien hace ya varios años que cerró su cuenta, y con el mismo pensamiento que el resto: “Twitter se me ha vuelto un medio ajeno. Demasiada pelea, demasiada ira, demasiado odio. Demasiada sobreactuación”, escribía.

Asimismo, recientemente otra figura conocida que se ha hartado de Twitter ha sido el periodista y presentador de televisión Christian Gálvez. Tras 11 años utilizándolo, publicó que “después de tanta tristeza, de tanta muerte a mi alrededor (en mi caso, muchas pérdidas), he decidido ser feliz, disfrutar de lo que hago y no tener siempre presente el cruel termómetro de Twitter sobre mis hombros”. Y añadió: “Cuando entré aquí -en la red social- prometía ser un lugar muy interesante, un semillero de buen rollo, de compartir cosas, celebrar éxitos”. Y, si bien “he saboreado los aplausos en muchas ocasiones, eso que la gente aplaude es una imagen. Muy pocos conocéis a Chris. No a Christian Gálvez, sino a Chris”.

De esta manera, si bien hay otros famosos españoles que lo han intentado, como es el caso de Lorenzo Silva o Máxim Huerta, también hay figuras extranjeras que han tomado el mismo camino. Por ejemplo, Meghan Markle tomó la decisión “personal de no tener ninguna cuenta”, así como Pamela Anderson, quien fue tajante: “Esperemos que encuentres la fuerza y la inspiración para seguir tu propósito y tratar de no dejarse seducir por el tiempo desperdiciado. Eso es lo que ellos quieren y lo que pueden usar para ganar dinero: control sobre tu cerebro”.