Paco León: «Pretendo seguir haciendo lo que me dé la gana»
Después de haber dirigido dos películas tan personales como las del díptico protagonizado por su madre, Carmina Barrios, Paco León trabaja ahora en la adaptación de una comedia australiana, y aunque éste es un encargo de la productora, asegura que pretende "seguir haciendo lo que le dé la gana".
"No tengo ni idea de lo que voy a hacer en el futuro. Tengo ganas de experimentar y no me gustaría cargarme de responsabilidad, si hay que cagarla, se caga. Prometo asumir el riesgo para buscar cosas bonitas y sinceras, y unas saldrán mejor y otras peor", ha afirmado en rueda de prensa Paco León, que esta noche recibe el Premio Eloy de la Iglesia en el decimoctavo Festival de Cine Español de Málaga.
Al recibir reconocimientos como éste, lo que le da "más miedo"es ponerse "importante"y no arriesgarse "a hacerlo mal", porque considera que "en este momento es lo más peligroso".
"Me da más miedo eso de que te acobardes y vayas a lo seguro que lo otro, porque la he cagado muchas veces y con dignidad. Hay que hacerlo, porque forma parte del trabajo", ha explicado.
Cuando se le pregunta por la sensación que transmite de que hace las cosas con suma facilidad, reconoce que "cuando algo apasiona tanto, no se escatiman esfuerzos", y lo que a otro "le puede parecer tremendamente duro"a él le parece "placentero, aunque no exento de trabajo".
"No me puedo quejar, hay que ser agradecido con todo y para mí está siendo muy fácil. Hay gente que tiene otros ritmos, que escribe un guión durante cinco años, pero yo soy de caca suelta, no tengo problemas digestivos, y me gusta la mano suelta y la creatividad rápida", ha resaltado.
En "Carmina y amén"incluyó una frase, "La vida es tan bonita que parece de verdad", porque se la escuchó una vez a su tío Paco y le pareció "bonita para hacer una reflexión sobre el tema que investiga la película, los límites entre realidad y ficción".
"Me pareció adecuada la frase, pero cuando veo ahora que la gente se la tatúa, porque hay una tía que se la ha tatuado en la cintura, no sé si es para tanto, pero yo encantado", bromea.
Muestra su agradecimiento al Festival de Málaga, no sólo por este Premio Eloy de la Iglesia, sino por haberle dado "la alternativa"con "Carmina o revienta", su primera película como director.
"Se confió en mí cuando no era tan fácil hacerlo, al meter una película tan rara y tan explosiva en la sección oficial teniendo voces a favor y en contra. Se hizo una apuesta clara y no había otra manera de corresponder a esa fidelidad que con la segunda película y con todas las que vengan".
Al mismo tiempo, el Festival de Málaga es "el mejor sitio para estrenar una película hoy en día en España", según el actor y director sevillano.
"Creo que ahora tengo que corresponder a este homenaje con la promesa firme de trabajar durísimo y hacer más películas buenecitas o lo mejor que me salgan para poder traerlas a Málaga y que Málaga se sienta orgullosa de la apuesta que un día hizo".
Al recibir el encargo en el que trabaja ahora, cuyo rodaje comenzará en agosto, la principal condición que puso para aceptarlo fue que le dejaran "intervenir en la adaptación", hacer una película con su "personalidad"y sus "gustos"y, en definitiva, que le permitieran "pacoleonarla".
Y es que, a la hora de aceptar cualquier trabajo, la premisa es que sea algo "que no haya hecho antes", según Paco León, abrumado por recibir este galardón del Festival de Málaga con sólo dos películas como director.
"Todo va tan rápido... En cuatro años he pasado de joven promesa a vieja gloria en este Festival. Esto son las redes, que lo aceleran todo tanto..."