El gran canal de Mussolini
Antonio Pennachi ganó el premio Strega con las aventuras de la familia Peruzzi
El aval con el que viene precedida esta novela es soberbio: Premio Strega y medio millón de ejemplares vendidos. Amén de la solvencia literaria del autor, la fórmula resulta tan infalible como inagotable: servirse de una estirpe para avanzar por un periodo histórico, en este caso, el convulso siglo XX italiano, con un estéril proyecto de Mussolini como telar de fondo. Aunque ningún ejemplo es comparable a la locura estalinista que pasó por acometer faraónicas infraestructuras como el canal del Mar Blanco, proyectos futuristas como cambiar cursos fluviales –los ríos soviéticos van hacia donde los bolcheviques sueñan, rezaba una canción–, construir presas gigantescas, desplazar la cordillera de Crimen o regar desiertos; lo cierto es que todos los regímenes totalitarios pergeñaron empresas delirantes que modificaron las vidas de los ciudadanos que se vieron comprometidos. Este es el caso de la familia Peruzzi, involucrada en el inconmensurable plan de Mussolini para transformar un cenagal del Agro Pontino en una extensa y fértil llanura.
Superstición
Todo un clan, de entre los más de treinta mil emigrantes que viajaron al sur, con un fuerte arraigo rural y que evolucionan bajo la sombra de una superstición que no llega a incurrir en el pesimismo pero que se apoya en rituales simbólicos para predecir las fuerzas externas. El misterio que rodea la identidad del narrador mantiene al lector en suspense. A través de esa «voz» –excesivamente coloquial, en ocasiones– seguimos las situaciones ordinarias del clan. Evolucionamos con ellos desde el compromiso familiar con el socialismo, primero, y el fascismo, después... Su participación en la Primera y Segunda Guerra Mundial y en la colonización fascista; su apoyo a Mussolini y sus métodos de violencia... Al publicarse el libro en Italia, Pennacchi fue acusado de ofrecer una visión tolerante del fascismo, cuando es evidente la condena al régimen totalitario y su propaganda demagógica; incluso el Duce es retratado «como el hombre que nos llevó al desastre». Estamos ante unas páginas que abarcan diversos géneros: ensayo histórico, arquitectura, análisis sociológico, retórica política... No es de extrañar que el autor manifestara que había nacido para completar esta novela.
Sobre el autor
Nació en los 50 y fue operario de fábrica. Al jubilarse ingresó en la universidad. Desde entonces ha publicado con éxito novelas y ensayos
Ideal para...
los que están interesados en comprender la historia de la primera mitad del siglo pasado en Italia
Un defecto
El exceso de coloquialismo que, en ocasiones, tiene la voz del narrador
Una virtud
Desmonta muy bien, a través de los personajes, el régimen fascista
Puntuación: 8