Los colombrinos regalan lotería al Rey y dos muñecas asturianas a sus hijas
Las constantes muestras de afecto que hoy han recibido los Reyes en su visita a Colombres, Pueblo Ejemplar de Asturias 2015, se han traducido en obsequios de sus vecinos, bien espontáneos o preparados de antemano, desde un décimo de lotería, hasta una empanada y dos muñecas para sus hijas.
Y así don Felipe se ha llevado en el bolsillo un décimo de Navidad al que una peña de esa población del oriente asturiano juega desde hace 35 años y que con muchísima fe le ha entregado una vecina, dispuesta a organizar "una fiesta muy gorda"en caso de que el 22 de diciembre resultara premiado.
Centenares de manos han estrechado los Reyes en el camino que han recorrido desde la Casa de Piedra de Colombres, una construcción indiana que alberga la biblioteca municipal, hasta el Archivo de Indianos, en la Quinta Guadalupe, de 1906, uno de los mejores exponentes de este tipo de arquitectura, de la que la villa es máximo referente.
Una señora de avanzada edad ha aguardado dos horas a la intemperie, sentada en su silla de ruedas, para asegurar un buen puesto desde el que estrechar las manos de los ilustres visitantes.
También han sido cientos las fotos que se han hecho durante las más de tres horas de recorrido, en palabras del propio don Felipe, un camino "hecho de memoria, de gratitud y reconocimiento".
La memoria se ha apreciado en los edificios de indianos magníficamente conservados que han hecho al pueblo merecedor del título, así como en los atuendos, tanto tradicionales asturianos como de la época de la emigración a América de los siglos XIX y XX, que hoy lucían muchos colombrinos.
La gratitud y el reconocimiento han sido recíprocos, porque los vecinos no han parado de vitorear a los Reyes, han colgado banderas nacionales y asturianas de sus balcones y les han hecho regalos.
El Monarca, en un discurso al término de la visita, ha hecho hincapié en el valor que tiene reconocer, como hacen con su museo y archivo, el peso que los indianos tuvieron en el desarrollo del pequeño concejo de Ribadedeva, del que Colombres es capital.
La población, dedicada sobre todo a la ganadería y el turismo, celebra una feria con venta de gastronomía y artesanía popular que cada vez se dedica a un país distinto y que incluye puestos solidarios; hoy se ha recreado, con mujeres y niñas vestidas de manera que parecían estar en una plaza de La Habana.
Porque Cuba, junto con México, fue el principal destino americano de la emigración que se marchó y volvió a la villa para mejorar la vida de sus paisanos y garantizar su futuro, algo que los Reyes han comprobado en el Archivo de Indianos, con documentos, fotografías y espacios que recrean fielmente aquella época.
Uno de los momentos más emocionantes de su estancia en Colombres se ha vivido en la iglesia de Santa María, donde una veintena de niñas y muchachas, al rítmico sonido del tambor, han recreado una antigua tradición de la comarca llamada la Reverencia.
Se trata de una ofrenda religiosa, cantada y bailada de forma solemne.
A su término, doña Letizia ha cogido en sus brazos a una de las niñas de corta edad que precedía al grupo de mozas, momento en que otra niña ha agasajado a los Reyes con un rosco típico de esta ceremonia y dos muñecas, hechas a mano y vestidas de "llanisca", uno de los trajes populares asturianos.
Las dos muñecas eran un regalo del pueblo de Colombres para la Princesa de Asturias y su hermana, la infanta Leonor, desde un pueblo que según el Rey "ofrece al mundo una lección de belleza, progreso y bienestar".
Efe