Los Tesoros salvados se guardarán en el Louvre

Las piezas se han trasladado primero al Ayuntamiento de París y de allí viajarán al museo. Las pinturas se moverán el viernes y se evaluarán sus posibles daños.

Imposible poder aguantar la tarde-noche del lunes la mirada mientras las llamas hacían presagiar lo peor en Notre Dame. No obstante, la catedral de París resistió y no se desplomó. En su interior alberga ricos tesoros; sin embargo, eran los rosetones una de las piezas que suscitaban mayor preocupación. Los tres principales así como el gran órgano no han resultado destruidos, si bien aún se desconoce el alcance de los daños como consecuencia del humo y las llamas. Representan las flores del paraíso y fueron construidos al mismo tiempo que el conjunto del edificio. «Por lo que he podido ver, las vidrieras no han resultado alcanzadas, los tres bellos rosetones que datan de los siglos XII y XIII estaban en pie afortunadamente», explicaba ayer el portavoz de la catedral, André Finot, quien pudo visitar el monumento durante la noche. Las vidrieras, por desgracia, no han corrido similar suerte, pués sí han sufrido daños: «Se trata de vidrieras del siglo XIX, mucho menos importantes, las que se han visto afectadas, pero no las joyas del siglo XIII. Ha sido casi como un milagro, estamos muy aliviados», reconoció. El órgano tampoco ha sido dañado, a pesar de la presión del agua que se empleó para extinguir las llamas, debido, fundamentalmente a que está situado a la entrada del edificio, una parte que no sufrió apenas desperfectos. Vincent Dubois, organista titular de la catedral, se mostraba ayer feliz por esto al tiempo que repetía «Es un milagro». En declaraciones a franceinfo señaló que había pasado toda la noche con los dedos cruzados para que no se desplomaran las claves de la bóveda sobre el órgano. ¿Cuál es el siguiente paso? «Desmontar el instrumento y preservarlo hasta que el techo y la bóveda estén perfectamente consolidados», señaló.

El gran órgano de Notre Dame –que alberga tres en total– está compuesto por cinco teclados con 109 teclas y casi 8.000 tubos. Afortunadamente buena parte de las obras que componen el Tesoro de la catedral están intactas, ya que fueron rescatadas por los bomberos durante las labores de extinción y trasladadas al Ayuntamiento de París. Desde allí, según informó el ministro de Cultura, Franck Riester, serán trasladas al museo del Louvre, donde se conservará, por ejemplo la túnica de San Luis, uno de los máximos atractivos de la catedral.Una de las pérdidas más significativas ha sido la de tres reliquias que se hallaban en el interior de la aguja y que no se pudieron salvar: la que se considera una de las 70 espinas de la corona de Cristo y otras dos reliquias de san Dionisio y santa Genoveva.

¿Y las pinturas? El titular de Cultura explicó que «podrán ser retiradas previsiblemente a partir del viernes por la mañana». Una vez se instalen en el Louvre se procederá a «protegerlas, conservarlas y restaurarlas» por los posibles daños que les haya causado el humo. Por su parte, el secretario de Estado de Interior, Laurent Nuñez, ha indicado que aunque «globalmente, la estructura se mantiene bien» se han detectado «algunas vulnerabilidades» en la bóveda así como en un frontón del transepto norte, que debe «asegurarse» y que ha provocado la evacuación de cinco edificios cercanos.