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Natalia de Barbaro: "La intuición en la mujer es más importante que la racionalidad”

La escritora polaca Natalia de Barbaro, un referente femenino con más de 600.000 lectores, publica “En mi vida falto yo”, un libro que insta a las mujeres a ser protagonistas de sus vidas

La escritora Natalia de Barbaro
La escritora Natalia de BarbaroEditorial Destino

Pese a la aparente libertad de la que gozan las mujeres en el mundo occidental, muchas siguen imponiéndose roles nocivos que les impiden ser ellas mismas. Este es el punto de partida de la prestigiosa psicóloga, poeta, “coach” y columnista polaca Natalia de Barbaro en su nuevo libro “En mi vida falto yo” (DESTINO), que insta a las mujeres a ser protagonistas de sus vidas, un viaje lúcido y poético sobre el viaje que realiza una mujer para conocerse a sí misma. Algo muy apropiado ahora que hemos celebrado el Día de la Mujer.

Con más de 600.000 lectores y traducido en nueve países, De Barbaro se ha convertido en un referente del movimiento femenino dentro y fuera de su país. ¿La clave de su éxito? “Quizá porque use un lenguaje que muchas mujeres reconocen como propio”, significa la autora, que en su libro habla que muchas mujeres que, “más que vivir su propia vida, interpretan papeles, representan estereotipos que no la dejan ser ella, porque ser tú misma y ser libre no es una elección tan obvia, a veces las mujeres siguen voces que no les sirven, unas veces es la mujer sumisa con la que tienes que ser pequeña para poder funcionar; otra es la mártir, la sufridora, que tiene que sacrificarse por todos para merecerse vivir y una tercera es la Reina de las Nieves que nos dice que tienes que seguir actuando y retándote a ti misma continuamente para poder sobrevivir”.

"Muchas mujeres viven alienadas, desconectadas de sí mismas"

Natalia Barbaro

Esos papeles “son como un puzzle, una mezcla de cosas heredadas, culturales, educativas…pero psicológicamente, la base de todo es el miedo –asegura-, tengo que encajar en el molde, en el personaje, no tengo el derecho de simplemente ser, como niña o como mujer joven me han dado muchas normas que tengo que seguir y si cuando llego a la edad adulta no lo hago, tengo miedo a que no me vayan a querer o aceptar, por eso tantas mujeres se sienten mal consigo mismas, con su vida y con su cuerpo”. Sin embargo, asegura, “aunque nos alejemos mucho de nosotras, siempre podemos encontrar el camino de vuelta para ser una misma”.

Para la autora, “muchas mujeres viven alienadas, desconectadas de sí mismas, su vida no es suya, pero, aunque nos salgamos un poco, debemos seguir nuestro propio viaje, todos tenemos un camino y vale la pena intentar encontrarlo”. Sin embargo, “a veces la mujer es su peor enemigo, su crítico más exigente porque no sabe quererse a sí misma. Yo trabajo con talleres y tengo el privilegio de escuchar sus historias, sus diálogos internos y las hay muy inteligentes y exitosas que dicen no merecerse nada de lo que tienen, mujeres con seis idiomas, con doctorados, niegan haber conseguido nada en la vida, y creo que esto es un problema a escala mundial”, afirma, por eso “quererse más es parte de la solución, tener más autocompasión. Si todo el mundo fuera más autocompasivo, el 95% de nuestros problemas no existirían”. Y confiesa: “Durante muchos años yo he intentado cultivar en mí mismo esa autocompasión, pero no es tan fácil, si hubiera un botón para activarla, todo el mundo lo querría, es una práctica muy necesaria, muy básica e importante, porque el amor a los demás empieza por uno mismo”, afirma.

El precio de ser amable

De Barbaro asegura que guardar dentro tristezas, iras, frustraciones, miedos…nos hace daño. “Hay un dicho que dice que la depresión es el premio que recibes por ser siempre amable y correcto, porque serlo es normalmente el resultado de reprimir o esconder esos sentimientos”. Para ella, es importante encontrar la niña interior que todas llevan dentro. “Hay una mujer salvaje dentro de cada una y de adultas, esta niña salvaje nos aporta cualidades, como el jugar, querer explorar, ser directas, hacer las cosas como los niños, sin límites ni tapujos y amando el mundo. Sin estas cualidades que nos aporta la niña interior seríamos como la inteligencia artificial, no tendríamos esa vida”, asegura una autora convencida de que en una mujer, “la intuición es siempre más importante que la racionalidad. Hay algo inexplicable que nos guía, quizá parte de esta intuición es la voz de nuestros ancestros susurrándonos al oído. Para mí –significa-, es cierto eso de que el corazón tiene razones que la razón no entiende y si me dieran a elegir entre razón y corazón, me quedaría con lo segundo”.

Por otro lado, la autora polaca, que vive intensamente la problemática de las mujeres y la conquista de sus derechos piensa que, “aunque se han dado pasos, aun un hemos logrado liberarnos realmente de las cadenas de siglos de patriarcado, no es un cambio que vaya a producirse de la noche al día, caminamos despacio, pero no es solo una lucha desde las mujeres, también lo es de amor y respeto entre hombres y mujeres y tengo esperanza en que las nuevas generaciones sean personas más auténticas y libres”, concluye.