Premios Feroz

Llega el «Verano» a los Feroz más feministas

Foto de familia de todos los premiados
Foto de familia de todos los premiadoslarazon

El debut de Carla Simón seduce a los críticos de la prensa en una gala reivindicativa en la que las mujeres entregaron todos los galardones

Cuando, en 2013, los Feroz comenzaron su andadura se publicitaron como "los Globos de Oro españoles". Y aquella etiqueta, entre otras muchas cosas, ha servido para que los premios otorgados por los informadores y críticos de cine crezcan en relevancia, adhesiones y glamour, hasta convertirse en una antesala de los Goya en toda regla y, a la vez, en su contrapeso ideal. Pero quizás nunca antes los Feroz habían sido tan fieles a la marca de "Globos de Oro españoles"como en esta quinta edición en la que el tsunami del MeToo y el Time's Up de la cita hollywoodiense se replicó, a escala, en la gala de anoche en el Complejo Magariños de Madrid. Unos premios, los de este año, de y por las mujeres.

Ya se intuía que las reivindicaciones coparían los discursos, pues la propia organización había anunciado que serían exclusivamente mujeres las encargadas de entregar los galardones: Úrsula Corbero, Anna Castillo, Inma Cuesta, Rossy de Palma y Leticia Dolera, entre otras. Pero, para cerrar el círculo, fue una mujer la que se llevó las mayores ovaciones en lo fílmico: Carla Simón, una debutante de 31 años que se ha ganado la admiración del gremio con “Verano 1993” (“Estiu 1993”, en el original catalán) y que ayer logró el premio a Mejor película dramática. Llevamos prácticamente un año elogiándola, desde que en Berlín, en febrero de 2017, deslumbrara a la prensa internacional. Poco queda por decir de una cinta pequeña en sus medios pero inmensa en su emotiva manera de retratar el duelo de una niña de 7 años (espectacular Laia Artiga) que pierde a sus padre por el sida. Simplemente soberbia.

“Ha sido una noche muy bonita, ya no sé qué decir”, declaró Carla Simón tras recoger el cuarto Feroz. “Éste es un sueño que se conjuga en femenino gracias a Carla”, apostilló su productora Valèrie Delpierre. Antes la cinta había ganado ya el Feroz a mejor directora y mejor guión, y deparó además un premio para David Verdaguer (Mejor actor de reparto). Los Feroz colocan en un lugar inmejorable a la cinta revelación del año de cara a los Goya, donde compite con “El autor” y “Handia”, entre otros. Otros grandes triunfadores fueron Nathalie Poza, mejor actriz por “No sé decir adiós”, y el omnipresente Javier Gutiérrez (mejor actor por “El autor”), que se acordó de la alta tasa de paro entre los intérpretes. La mejor comedia o musical del año fue, para los informadores de cine, “La llamada”, dirigida y creada para el teatro originalmente por Javier Ambrossi y Javier Calvo, unos emocionadísimos “Javis” que fueron el blanco de numerosos chistes en la gala.

“Me gustan las galas porque es el único sitio en el que las mujeres cobran igual que los hombres: nada”, exclamó Marián Álvarez. Es solo una de las múltiples frases reivindicativas de la noche en una cita en la que, por supuesto, no faltaron palabras como “empoderamiento”, “heteropatriarcado”, etc. Adelfa Calvo, estupenda en “El autor” y, de hecho, ganadora del Feroz a mejor actriz de reparto, dedicó su galardón a “todas las mujeres que han cumplido 50 y quieren seguir soñando. Y que no se nos juzgue a las actrices por el peso o el físico, como no se hace con los actores”. Además, pese a ser “el Feroz de las mujeres”, hubo pullas a la escasez de nominadas. Leticia Dolera, una de nuestras actrices más identificadas con el activismo feminista, ironizó con la “ayuda” de los Feroz a las mujeres para demostrar que “podemos ser azafatas”. La también directora recordó que solo el 7% de las películas españolas son encabezadas por mujeres.

El conductor de la gala, Julián López, lanzó varios guiños más propios de los Globos de Oro: cito a Kevin Spacey, Harvey Weinstein, Woody Allen... En clave interna, bromeó sobre el fraude de la compra de taquilla en el cine español y el inevitable asunto catalán. El “ex chanante” fue tan divertido como ácido con diversos personajes de la profesión y con los propios premios Feroz, “que no conoce nadie”. El presidente de la Asociación de Informadores Cinematográficos, Pedro Vallín, pidió a los creadores “brindar por vuestros cuentos y ojalá el año que viene levante esta copa una mujer, celebrando que hay más cuentistas”. Finalmente, la homenajeada con el Feroz de Honor, Verónica Forqué, recitó de memoria los muchos directores con los que ha trabajado en una larga carrera que, esperó, no se acabé sin actuar a las órdenes de una mujer.