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Coronavirus

La respuesta más contundente al 8M y las manifestaciones del Gobierno

Se han autorizado a aquellas que reúnan a menos de 500 personas. Ahí, “ataca con todo”, ironiza Alfonso Reyes

El delegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Jose Manuel Franco
El delegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Jose Manuel FrancoJesus G. FeriaLa razon

La Delegación del Gobierno en Madrid no va a autorizar manifestaciones de más de 500 personas por el Día Internacional de la Mujer el próximo 8 de marzo en la región ya que la Consejería de Sanidad lo desaconseja.

Nosotros estamos siguiendo a rajatabla esa recomendación” porque “tenemos que cumplir las normas” y porque “tenemos que ayudar a preservar la salud de los madrileños”, ha dicho en una entrevista en Onda Madrid, el delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco.

Por el momento, la Delegación ha recibido y autorizado “algunas” peticiones de organizaciones feministas para manifestarse por ser concentraciones de menos de 500 personas que “mantienen los parámetros exigibles” en la situación sanitaria, según Franco.

“Las que hemos recibido hasta ahora no se han prohibido porque mantienen los parámetros exigibles ahora mismo en esta situación de pandemia” respecto a las medidas “que se comprometen a adoptar”, como la distancia social, “y también, lo más importante, son manifestaciones de menos de 500 personas”, ha incidido.

Eso ha recibido muchas críticas. Desde el alcalde, Almeida a la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, que ha dicho que no va a ir.

Mucho más irónico ha sido el ex jugador de baloncesto Alfonso Reyes: “Hasta una concentración de 499 humanos, el hideputa no se activa, no se siente amenazado, se aletarga y reposa. De 500 en adelante, ataca con todo. Tengo que pensar dónde estuve con tantas personas la semana de mi contagio”

Por otro lado, ha comentado que en los casos de peticiones de concentraciones de más de 500 personas van a pedir a los convocantes que "reflexionen" y "busquen otras vías para manifestarse", de forma que "esa justa reivindicación el día 8 de marzo no implique un atentado, entre comillas, contra la salud".

Con esta medida, Franco asegura que no habrá una concentración multitudinaria como la del 8M de 2020, de la que "no se arrepiente" haber autorizado porque "no había ningún motivo objetivo" para prohibirla y haberlo hecho hubiera sido "prevaricar".

“Estoy satisfecho de haber hecho lo que se hizo en aquel momento”, ha dicho Franco, que reconoce que se pudo ocasionar “algún contagio extra”.