Montañismo

El increíble atasco en el Everest

Más de 200 personas alcanzaron ayer la cima de la montaña más alta del mundo

El Everest vivió una jornada donde había que esperar para subir
El Everest vivió una jornada donde había que esperar para subirlarazon

El pasado miércoles 22 de mayo el Everest vivió uno de los episodios más sorprendentes de la historia de sus ascensiones. Más de 200 montañeros intentaron el ascenso a la cumbre, la mayor cifra jamás vista desde allí arriba.

Pero la hazaña, lejos de ser recordada por ese número de tres cifras, pasará a la historia por el gran embotellamiento que se produjo en la cima de la montaña más alta del mundo y que obligó a esperar a enorme altura a muchos escaladores con el riesgo de congelación y mal de altura que ello conlleva porque ... el tiempo pasa y el oxígeno se va gastando.

Mirando la fotografía difundida por uno de los montañistas que vivió la incertidumbre en primera persona, parece que están haciendo cola para pagar en la caja del supermercado. No es tal el caso y sin ser realmente conscientes, se están exponiendo a la muerte. Porque por desgracia, el récord dejó dos tragedias: el estadounidense Don Cash y la india Anjali Kulmani.

Don Cash falleció en las cernacías del Escalón Hillary (a unos 8.7000 m) mientras descendía después de haber alcanzado la cumbre. Según las informaciones, el estadounidense de 55 años se habría sentido mal en la misma cima y tuvo que ser ayudado a descender. Un poco más abajo del Escalón Hillary no resistió más y falleció a primera hora de la tarde.

Más tardes se conoció la otra tragedia del día. La muerte de Anjali Kulkarni que, acompañada por su marido, logró llegar a la cumbre, pero en el descenso se sintió mal y también perdió la vida.

Una vez más se vuelve a abrir el debate sobre si todo el mundo está realmente preparado para adentrarse en una de las rutas más complicadas del mundo. Más de 9.000 personas han llegado ya a la cima del Everest, pero cada vez son más los escaladores expertos que se quejan de la cantidad de novatos que intentan la subida.

El buen tiempo es una condición determinante para afrontar el ascenso, por eso los aspirantes a culminar el Everest coinciden los mismos días en su itinerario hacia la cumbre. Como sucedió ayer y también hoy.

El ser humano no tiene límites, pero hay que tener la capacidad de saber gestionar los riesgos.