Copa del Rey de Baloncesto
83-100. Una respuesta a lo grande
«Pues yo más» parecieron decir los tiradores del Real Madrid ante el recital tirador del Barça en la primera semifinal.
«Pues yo más» parecieron decir los tiradores del Real Madrid ante el recital tirador del Barça en la primera semifinal. Si los azulgrana presumieron de un 57 por ciento de acierto y 12 triples anotados para acabar con el Unicaja, los hombres de Pablo Laso fueron un poco más lejos. No sólo mejoraron la cantidad, también superaron el porcentaje. ¡Dieciséis triples con un 64 por ciento de acierto! El Madrid tiró mejor de tres que de dos. No se había visto nada igual en la historia de la Copa. El campeón defenderá el título después de una exhibición que dejó en nada la primera parte del Joventut.
A la dinamita del Barça respondió el Real Madrid con la mayor exhibición tiradora de la historia del torneo. No sólo fue la cantidad de triples (16), sino el porcentaje de acierto que ofrecieron los lanzadores de Pablo Laso. Dos de cada tres veces que se levantaron más allá de los 6,70 metros, la pelota acabó dentro del aro de la Penya. El Madrid resolvió la semifinal ante el Joventut a golpe de triple y con unos minutos de buena defensa en el tercer cuarto. Cuando el equipo es capaz de trabajar atrás a la altura de lo que puede ofrecer en ataque, el rival lo pasa muy mal.
Laso se harta de repetirlo en público y en privado: la defensa es lo que convierte a su equipo en realmente temible. Los jugadores, aunque muchas veces no lo parezca, lo tienen asimilado, y lo repiten como un mantra cuando tienen la mínima oportunidad, pero... Luego pasa lo que mostró el Madrid en los dos primeros cuartos. Se olvidan de defender y, como de descaro la plantilla del Joventut anda sobrada, los verdinegros aceptaron el intercambio de golpes durante la primera parte y salieron ilesos. Con la mezcla de jóvenes y veteranos que le ha convertido en la sensación de la temporada, los de Badalona reivindicaron su condición de semifinalistas con 52 puntos anotados en los primeros 20 minutos. El Madrid dejó hacer. Es como si el equipo tuviera asumido que en el momento en que apretara el botón de la defensa, el partido se iba a inclinar de su lado sin remedio. En los minutos más flojos del Madrid, el conjunto se agarró a los mejores minutos en la Copa de Bourousis y el acierto exterior de Rudy y Nocioni. Dio la impresión de que el equipo dejó que el rival se moviera con comodidad hasta después del descanso.
En el tercer cuarto llegó la hora de la defensa, de aumentar la exigencia e impedir que el ritmo anotador de los verdinegros se mantuviera. El grupo decidió trabajar atrás y en ataque apostó por buscar a Ayón. El mexicano, por primera vez en la temporada, se está sintiendo protagonista. Con un juego interior endeble enfrente, el pívot anotó y se hizo fuerte por dentro. El parcial arrancó con un 9-0, se prolongó hasta un 2-14 y se cerró con un 2-20 que dejó al Joventut herido de muerte (54-66). El trabajo atrás se complementó con el acierto desde el exterior. Si el talento habitual se muestra un poco más afinado de lo normal suceden cosas como la que pasó ayer. El «Chacho» y Llull convirtieron el partido en una exhibición y los triples se sucedieron sin descanso. Los ocho puntos encajados en el tercer cuarto y la inercia de acierto en los minutos finales permitieron al Madrid un desenlace de partido tranquilo. El equipo pudo dosificarse y llega al día decisivo sin ninguno de sus hombres básicos cargados de minutos. La única preocupación es una torcedura de tobillo de Nocioni.
Un nuevo clásico está servido y en el Madrid saben que lo de la primera parte ante el Joventut, con un rival de la talla del Barça, no se puede repetir. «Si no jugamos serios desde el principio nos ganarán por 20», aseguró Llull. Laso coincide con el héroe madridista de la última final: «No nos puede pasar lo que nos ha sucedido en los dos primeros partidos». El clásico exige la mejor versión de todos.
Ficha técnica:
83 - FIATC Joventut (26+26+8+23): Mallet (9), Ventura (6), Kirksay (7), Llovet (4) y Savané (14) -equipo inicial-, Hannah (10), Miralles (6), Vidal (9), Abalde (3), Suárez (13) y Suton (2).
100 - Real Madrid (24+22+25+29): Rodríguez (15), Llull (19), Fernández (12), Reyes (11) y Ayón (13) -cinco titular- Rivers (5), Nocioni (9), Campazzo (-), Maciulis (6), Carroll (2), Bourousis (6) y Slaughter (2).
Árbitros: Arteaga, Jiménez y Cortés. Sin eliminados.
Incidencias: partido de semifinales de final de la Copa del Rey 2015 de baloncesto disputado en el Gran Canaria Arena ante 9.806 espectadores.
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