Agonía con premio gordo

Sufriendo como no se había sufrido en todo el campeonato. Con un tapón de Alba Torrens en el último segundo que evitó un disgusto mayúsculo. Así liquidó España a Montenegro. Después de siete victorias y ninguna derrota llegó el cruce de cuartos, el partido del drama, y la Selección también terminó sonriendo, aunque nunca estuvo tan cerca de la derrota en este Eurobasket. El equipo de Lucas Mondelo se impuso a las balcánicas, luchará por las medallas un Campeonato de Europa más y ya tiene garantizada una plaza en el Preolímpico. Era el objetivo mínimo que perseguían. No es un premio menor, pero este grupo no se conforma con eso. Quieren más, quieren un metal y... ¿por qué no soñar con el oro? Lo más alto del podio es la única forma de lograr el pasaporte directo para Río. Pero antes de eso, hoy, llega la semifinal y enfrente estará Francia. La reedición de la última final del Eurobasket, la reedición del partido en el que España se proclamó campeona.

Aquella España tenía a Amaya Valdemoro, Elisa Aguilar y, sobre todas, a Sancho Lyttle. Sin Sancho, Lucas Mondelo y Laia Palau, las referencias del grupo, se hartaron de decir que todo el mundo tenía que dar un paso al frente. Y eso precisamente es lo que permitió derrotar a Montenegro, el rival más incómodo con el que se ha encontrado la Selección en lo que va de torneo. Y eso que España, después de un partido apretado, despegó en el último cuarto (62-52, min 33). Las 50 faltas personales que señalaron los árbitros marcaron el desenlace. España no pudo contar con Ndour medio partido, pero apareció Laura Nicholls. La cántabra estuvo enorme –8 puntos, 16 rebotes y la única que generó problemas de verdad atrás a Robinson–, pero cuando Nicholls cayó por faltas el aire se hizo irrespirable. Alba Torrens había sido en los tres primeros cuartos el referente habitual en ataque. Sus 28 puntos hablan de un talento como no hay otro igual en el campeonato. Sostuvo a España en ataque, pero en los minutos finales le pudo el cansancio.

Con Ndour y Nicholls eliminadas y Alba agotada, fue el turno de Anna Cruz. La escolta anotó los cinco últimos puntos de España. Se fabricó una canasta que devolvió el mando cuando Montenegro ya se había puesto por delante. Lo mejor llegó con una canasta y tiro adicional a falta de 9 segundos que situó el definitivo 75-74. Lo que sucedió en ese tiempo volvió a ser culpa de Alba Torrens. Un providencial tapón a tres metros de la canasta evitó que las balcánicas acabasen con la única selección invicta del torneo.

Ahora llega Francia, el peor rival posible. Las galas son básicamente el mismo equipo que hace dos años perdió la final con España. Son muy ordenadas, controlan el rebote y tienen un juego interior poderoso. Sufrieron para ganar a Rusia (77-74), pero ganaron. Hoy, España-Francia (20:30, Tdp). Suena bien.

. Ficha técnica:

75 - España (16+23+16+20): Nicholls (8), Palau (2), Torrens (28), Ndour (12) y Xargay (6) -equipo inicial-, Domínguez (6), Cruz (12), Martínez, Gil (1) y Herrera.

74 - Montenegro (17+20+15+22): Skerovic (11), Jovanovic (10), Bjelica (5), Perovanovic (9) y Pasic (4) -equipo inicial-, Vucetic (2), Aleksic (4), Vujovic (6) y Robinson (23).

Árbitros: Anne Panther (ALE), Luca Mazzoni (ITA) y Gellert Kapitany (HUN). Eliminaron por cinco personales a Laura Nicholls (min.34), Perovanovic (min.37,40) y Astou N'Dour (min.38,30).

Incidencias: Partido correspondiente a los cuartos de final del campeonato de Europa femenino disputado en el Arena Budapest de la capital húngara ante unos 500 espectadores. EFE